Observatorio de medios
La normalización mediática del fascismo: de Charlottesville a Valencia

Del asesinato de una manifestante antifascista en Charlottesville a las agresiones neonazis del lunes en Valencia, los medios de comunicación están construyendo un relato tibio con los fascistas desde una supuesta equidistancia con quienes sufren y combaten sus actuaciones.

Neonazis en Valencia 2
Grupos neonazis acosan a la manifestación de izquierdas del 9 de Octibre en Valencia. Eva Máñez
11 oct 2017 07:00

Al principio fue Charlottesville. Aquel fin de semana en el que los nazis tomaron las calles de esa localidad acabó con una joven antifascista asesinada. La Sexta o El País lo llamaron “choque entre grupos radicales”.

Quisimos creer que no había línea editorial detrás y que lo que ocurría era que quienes firmaban esas noticias y quienes las aprobaban habían dado por bueno eso de que los extremos se tocan. No cambia los efectos de la información, y tampoco mejora la situación en nada, pero nos pareció que era así. Nos preguntamos de dónde había salido esa gente a la que no se le revuelve todo al ver nazis desfilando con antorchas.

Lucrecia, Carlos, Guillem. Cruzarte de acera, evitar zonas, correr de vez en cuando, llevarte alguna hostia. Nuestro profesor de Historia y lo que nos contaba. Nos preocupamos porque no habían entendido que fascismo es tan sinónimo de odio como antifascismo lo es de democracia. Nos preocupamos mucho, y aún no habíamos visto nada.

Compartiendo agenda

Con la entrada del referéndum en la agenda mediática, los motivos cambiaban: a ese tramposo discurso hegemónico que sostiene que es lo mismo desear exterminar gente que querer evitarlo, se unía ahora el hecho de que, en el tema catalán, la línea editorial de los grandes medios no está tan lejos de lo que defienden los fascistas al respecto. Lo importante es preservar la unidad de España, aunque sea a base de hostias.

Se empezaba a dar entonces una conjunción de intereses entre los informadores, con actitudes cada vez menos profesionales para imponer su discurso, y esa extrema derecha que algunos consideran minoritaria y otros durmiente por estar muy bien representada.

Incluso hay quien decía, hace tan solo tres semanas, que ni siquiera existe. José Ignacio Torreblanca, jefe de opinión del diario más vendido en quioscos y con mayor difusión en internet, publicaba lo siguiente:

“En este país nos pasamos todo el día hablando de una extrema derecha que no existe, ni política, ni social, ni electoral, ni parlamentariamente. Es algo que todos los medios y observadores internacionales llevan años señalando”.

Lo que sí hay, continuaba, es una “extrema izquierda autoritaria” de la que apenas se habla. No debe de tener la costumbre de leer su propio periódico.

Dos días después de que publicase este artículo, la asamblea convocada por Podemos en Zaragoza para tratar de abrir una vía de diálogo en el conflicto catalán era rodeada por una concentración convocada por Movimiento Aragonés Social, un grupúsculo fascista local.

Los trabajadores de TVE denunciaban que el director de informativos del fin de semana había omitido deliberadamente la palabra “ultras” en su crónica de lo que llamaron “manifestación por la unidad de España”. Antena 3 hacía una crónica correcta en su informativo del mediodía, que alguien decidía cambiar para el de la noche: los “ultras” pasaban a ser “manifestantes enarbolando banderas de España”.



Y llegó la catarsis mediática: “histórica manifestación por la Constitución” en la que “la Cataluña silenciada alza la voz”. El término “manifestación sin incidentes” era de los más repetidos para referirse a la protesta por la unidad de España celebrada el domingo en Barcelona.

Entre las imágenes que han circulado en redes sociales, hubo entre otras cosas vídeos con agresiones a jóvenes magrebíesa un fotográfo que pensaban era de TV3. Se hicieron saludos fascistas y se llevaron banderas de Falange. Por muy minoritario que fuese, ¿eso es “sin incidentes”?

A todo esto se suma el hecho de que ninguno de los participantes haya señalado que allí había fascistas: manifestarse de su mano y no denunciarlo es un incidente en sí mismo, y no pequeño. El columnista Manuel Jabois señalaba en su crónica que la organización no había permitido “levantar el brazo ni para pedir un taxi”. Buen trabajo, sí, de maquillaje. 

Los cazadores de noticias falsas y posverdades de internet se sumaban a la tarea desmintiendo varias imágenes que habían circulado durante el día, en las que supuestamente se mostraba simbología fascista en la manifestación. Ni la crónica del diario sobre la manifestación ni el reportaje sobre las fotos falsas llevaban mención alguna a las imágenes que sí habían tenido lugar.

A cara descubierta

El lunes en Valencia un grupo de nazis salió a agredir a gente, a cara descubierta y rodeados de cámaras. Quizá tuvo que ver, entre otras cosas, la seguridad que da haberse mostrado y que la respuesta haya estado entre el silencio y el aplauso.

Gritaban consignas como “Puigdemont al paredón” o “al podemita, dinamita”. Entre gritos de “Sieg Heil” también cantaban “¿dónde están, no se ven, los amigos de Guillem?”. Se referían al Guillem que mencionábamos al principio, junto a Carlos y Lucrecia. Son solo tres de los 88 crímenes de odio que recogía en 2015 un estudio al respecto, la mayoría cometidos por neonazis o ultraderechistas.

Guillem Agulló fue asesinado por su ideología en 1993, cuando tenía 18 años, a manos un grupo de cinco nazis en la localidad castellonense de Montanejos. Tras asestarle una puñalada mortal en el corazón, abandonaron el lugar haciendo el saludo romano.

Al día siguiente, las agresiones de los que cantaban en las calles contra él ya casi ni eran noticia. Ni siquiera para hablar de que delegación del Gobierno hubiese felicitado a la policía por una actuación que se puede resumir en dos cifras: cero agresores detenidos, cero agresiones evitadas.

Mientras lo fue, la narración de lo ocurrido no cambió respecto al guión habitual. Antena 3 hablaba de “violencia entre manifestantes” y a los fascistas les llamaba “defensores de la unidad de España”. En Telecinco lo ocurrido era contado como una “trifulca entre radicales” y el redactor se preocupaba en señalar que la presencia de la CUP y Arran en la manifestación no estaba autorizada.


La versión de que los agredidos iban provocando era también la de la crónica de El País, que literalmente decía que su presencia “causó inquietud”. A lo ocurrido lo definía como “bronca”, “batalla campal” e “incidentes entre simpatizantes de la extrema derecha y la izquierda independentista”. 



En declaraciones a eldiario.es, un manifestante que se enfrentó a los neonazis para defender a dos personas que estaban siendo agredidas ha dicho que aquello no eran “enfrentamientos” sino “la extrema derecha de cacería”.

¿Qué más tiene que pasar?, ¿hasta dónde piensan tensar la cuerda? Serán cuatro gatos, ojalá. Pero la campaña de imagen que les están haciendo y la aparente indiferencia de quienes comparten marchas con ellos les está poniendo a huevo dejar de serlo.

Sobre este blog
Una visión crítica de la caverna mediática
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.
Gonzalo
11/10/2017 17:31

Siento, Álex, leer tus desolaciones, pero creo que el fatalismo relamido no es la mejor visión para afrontar con amplitud de miras lo complejo de la situación. Dices que Podemos no tiene ningún valor moral. ¿Puedes argumentar tus pesares? Sin embargo, estoy de acuerdo contigo. Esto hay que mirarlo desde una perspectiva global, como pone de manifiesto el artículo. Una unión de las fuerzas llamadas progresistas del país puede ayudar. Cuando tenemos tres grandes partidos juntos (PP, PSOE y Cs) es difícil avanzar. Quizá es posible que tirando de ese hilo puedas encontrar alguna calma a tu pesar.

6
2
alex_lorenzo
11/10/2017 15:19

El que piense que el problema es solo en Catalunya, está muy equivocado. Si la cagan allí, jorobarán la economía de la región más rica de España, y por simpatía, se escorará todo el barco. Si vienen un 20% menos de turistas, se hunde. Y entonces a quién votaremos para que lo arregle?? Vendrá un salvador de extrema derecha aquí también?? Vamos camino de un neofranquismo?? La desacreditación moral de Podemos está en favor de la última opción. La exacerbación del sentimiento patriótico a cuenta de la independencia de Catalunya, lo mismo. Tengo cierto miedo de que mis hijos no vayan a vivir en democracia. Volverá a haber españoles exiliados en ...Venezuela.

10
7
Sobre este blog
Una visión crítica de la caverna mediática
Ver todas las entradas
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.
Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Comunidad de Madrid
Memoria histórica Contra la basura y el olvido: tras la pista de los cuerpos y de la memoria de los brigadistas internacionales
El Salto acompaña a un contingente internacional de políticos, políticas y activistas en una ruta en memoria de los brigadistas internacionales que acudieron a luchar a España contra el fascismo, en un ejercicio inspirador para el presente.
Opinión
Opinión La coherencia de las políticas de Trump
No se pueden entender los aranceles de Trump sin su lucha por el control de los recursos minerales, sin Groenlandia, Ucrania o la República Democrática de Congo.
El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.
Crisis climática
Balance climático El Mediterráneo se consolida como zona especialmente vulnerable al cambio climático
Las víctimas de la dana suponen dos tercios de las muertes por fenómenos extremos en Europa en 2024, según un informe conjunto de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial que hace un balance climático del continente el pasado año.

Últimas

Eventos
Taller de podcast El Salto invita a estudiantes a explorar las posibilidades del formato audiovisual
Proponemos un taller de guion y producción de programas para estudiantes de comunicación y periodismo los días 24 de abril y 8 de mayo.
València
València CGT denuncia graves incumplimientos del plan de inundaciones en la dana de València
Un informe incorporado a la causa judicial señala la falta de seguimiento de los propios protocolos autonómicos en el día de la tragedia y la víspera.
Partidos políticos
CIS de abril La ultraderecha recorta votos al PP arrastrada por el efecto Trump
El barómetro de abril vuelve a situar al PSOE como fuerza más votada. La izquierda española sigue su contienda por todo lo bajo.
Comunidad de Madrid
Educación El Gobierno de Ayuso deberá pagar 1.000 euros a una profesora por el exceso de horas lectivas
Según CCOO, hasta 6.500 profesoras y profesoras se podrán acoger a esta sentencia que supone una penalización a la Comunidad de Madrid por el exceso de horas extras que realiza el profesorado.
Laboral
Laboral El sindicato ELA alerta sobre la salud mental de las trabajadoras en intervención social
“Somos un instrumento de contención porque tratamos con población muy dañada, estamos en mitad del sándwich”, explica la educadora social Vanesa Núñez Moran.

Recomendadas

Poesía
Culturas Joan Brossa, el mago que jugó con la poesía para reinventar el poder de la palabra
Casi inabarcable, la producción creativa de Joan Brossa se expandió a lo largo —durante medio siglo XX— y a lo ancho —de sonetos a piezas teatrales, pasando por carteles o poemas objeto— para tender puentes entre el arte, la política y el humor.
República del Sudán
Sudán Cara a. Un Sudán en guerra
Se cumplen dos años de una guerra que ya deja más de 13 millones de personas desplazadas y más de ocho millones de sudaneses al borde de la inanición.
Andalucía
Memoria histórica La inanición de la memoria andaluza
Las políticas públicas de memoria en Andalucía se encuentran en un estado de paralización que pone en duda la voluntad de la Junta por la reparación efectiva.