Música
Public Enemy, Bomb Squad y el sonido de la revolución

Hace 30 años que Public Enemy irrumpieron con Yo! Bum rush the show, su primer disco, en el que inauguraron alianza con el equipo de productores Bomb Squad. Los mismos que empujaron la materia funk al cuadrilátero, donde la celebración era el miedo a un planeta negro.

Public Enemy
Public Enemy en 1987, cuando publicaron su primer disco.
2 nov 2017 11:20

Nada más pinchar “You’re gonna get yours”, el corte que abre el LP inicial de Public Enemy, retumba un pálpito perturbador bajo las rimas speedicas de Chuck D y el verbo bufonesco de Flavor Fav.

Ese sample de guitarra en bucle chocando contra el sonido de un 98 Oldsmobile frenando en seco. El retumbar de una batería con cadencia funk granítica. El puzle resuena como la readaptación posapocalíptica de un black panther en plena era Reagan.


Descontento y llamada a la acción. Se había acabado la música de negros para blancos. Esto era un gueto para el gueto, como el soñado por Sly & The Family con There’s a riot goin’ on (1971) y Miles Davis por medio de On the corner (1972). En su momento, tanto el disco de Miles como el de Sly fueron vapuleados, aunque hoy en día cumplen la máxima de “regional=universal”.

Ambas muestras de orgullo enfebrecido fueron recogidas por Public Enemy, comenzando por los métodos de Hank Shocklee y su troupe de científicos del ritmo. “Cuando Chuck D y yo comenzamos a trabajar, convencí a Eric Sadler para poder ahuyentarme de mis locas ideas. Quería a alguien en quien pudiera confiar a partir de sus habilidades como músico, porque había cosas que quería probar con las frecuencias. Quería hacer algo que no fuera melódico. Deseaba frecuencias que chocaran entre sí y crearan otra frecuencia de disonancia. Y eso es algo complejo, porque si lo haces mal, creas desorden y te quedas en nada”.

“Cuando trabajas con escalas musicales, hay un montón de cosas que sabes que funcionarán bien juntas. Pero cuando estás trabajando con disonancias, estás tomando el concepto de escalas y arrojándolo por la ventana. Si las tocas en un piano, sonarán como una mierda. Pero si creas el sonido y el concepto que acompaña a ese sonido, entonces harás algo diferente”. Y el resultado fue la adaptación bélica de las interioridades del groove; citando a la épica: el sonido de la revolución funk.

Schocklee tardó tres años en forjar un armazón rítmico apropiado para Yo! Bum rush the show (1987). Un cuerpo de trabajo para el que, al principio, ni el propio Shocklee sabía que iban a formar parte sus fórmulas sobre estilo y texturas de sonido.

Solo un año después, los tempos moderados y minimalistas de la escuela hip hop se alimentaban de una tensa coagulación instrumental, con un trío de trabajos marcando la pauta: Follow the leader (1988) de Eric B. & Rakim, Straight outta Compton de N.W.A. y sobre todo It takes a nation of millions to hold us back, la segunda colaboración de Bomb Squad con Public Enemy.

En uno de sus cortes, “Night of the living baseheads”, Shocklee se apropia de una pieza pequeña del “Fame” de David Bowie. La razón de hacerlo era liberar la tensión en el crescendo y poder retomar el complejo guión de musical armado, donde los samples de trompeta se repiten como la versión funk de un demente.


La cirugía aplicada a las posibilidades del ritmo cobraba cada vez mayor responsabilidad con una empresa que, a cada nuevo descubrimiento o giro, se hacía más y más relevante, como las ambiciones esgrimidas por Shocklee en “Rebel without a pause”: “Si la línea de saxo de la canción la hubiera tomado en el downbeat, sonaría mucho más funky. El oyente podría estar más en contacto con el groove, pero perdería mucha intensidad. Esta muestra que, originalmente, era una pieza melódica genial, ahora suena como si se tratara de una guitarra de rock. Y cuenta con ese mismo sentimiento y vibración. Porque una de las cosas que realmente quería hacer era captar la sensación del rock & roll sin tener que hacer uso de guitarras”.

La necesidad de adoptar la semántica de la electricidad como fuente de intensidad generó un punto de contacto viral en plena readaptación pop de bandas que, como Disco Inferno y My Bloody Valentine, bebieron de los métodos de Bomb Squad para poder metabolizarse en una música de mayor fisicidad.

En cuanto a la formación irlandesa comandada por Kevin Shields, en su corte “Instrumental No 2”, llegaron a samplear “Security of the First World”, interludio perteneciente al segundo LP de Public Enemy. Aunque donde su eco resulta todavía más patente es en “Soft as Snow (But warm inside)”, primer corte de Isn’t anything (1988).

“Me estaba volviendo más consciente de las frecuencias altas del sonido y, en parte, de la materia hip hop. Estaba pensando:‘No tengo que seguir aunando todas estas pistas unas encima de otras; hazlo de forma separada y luminosa”. En estas declaraciones de Shields queda expuesta la esencia de las técnicas empleadas por Shocklee y los suyos: un novedoso y sorprendente método para hacer mover la música: en lugar de cambiar los acordes o las notas, sus pistas se desplazan a través de diferentes combinaciones de sonido sampleado. Cada bloque ocupa una posición diferente en el paisaje sonoro.

Inventores de desarrollos concentrados, configurados entre pistas de tracción milimétricamente horizontal, aparte de los espeleólogos más aventurados en materia pop, donde la patente de Bomb Squad se extendió con más fuerza fue hacia grupos que compartían su mismo enfoque aguerrido del funk. Como EPMD, que, con su LP Strictly Business (1988), sonaban como alumnos queriendo jubilar al maestro antes de tiempo.

Sin embargo, a Shocklee y a The Bomb Squad aún les quedaba mucho kilometraje por cubrir. Y la excusa ideal fue Fear of a black planet (1990), donde albergó una versión funk maximalista perfectamente ordenada.

Del primer al último tema, ensambla un discurso que reclama los poderes instrumentales como forma crítica. Aunque lo más asombroso es la táctica empleada: la reinvención del legado de la “música negra para blancos”, la cual filtra en las tripas de un mega conglomerado rítmico, donde todo sample es volatilizado hacia la confrontación frontal. La misma que es inflamada por unas rimas, nacidas desde la ambigüedad, la provocación y la controversia, que incitan al razonamiento transversal.


Las arterias de la calle sudando funk combativo, Shocklee entendía Public Enemy como un concepto, no un grupo formal: “Para mí, Public Enemy es todo señal, sin ruido. Escucha una pista como "Brothers gonna work it out" de Fear of a black planet. Claro que evoca imágenes de caos. En la misma, son repartidos pedacitos de Prince, James Brown, Melvin Bliss y muchos otros, con total desprecio por la compatibilidad musical. ¿Pero está hecho al azar?, ¿es accidental? No para mis oídos”.

Y mucho menos para alguien que simbolizaba la representación musical de los discursos de Chuck D y que, dos décadas después de haber realizado la obra de su vida, reconocía que “en un momento en el que tenemos más cosas por las que estar enojados, el negocio de la música, en su totalidad, ya no tiene nada que decir. Si miras hacia atrás, desde la década de los 60 y 70, la música siempre reflejaba lo que estaba pasando en la sociedad. Había artistas que, incluso sin tener un punto de vista político, podían hacer uno o dos discos que eran significativos en un frente social o político”.

Nostalgia por las trincheras, aun así, nunca debemos obviar a formaciones de hoy en día como Death Grips, que han entendido mejor que nadie la herencia de Shocklee: cómo una base instrumental puede destilar tanta o más reflexión que la fuerza de la palabra.

Archivado en: Música
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Música
Música Apoteòsic Muguruza
Barcelona, Palau Sant Jordi. 24 de enero de 2025.
Música
Nakar “¿Quién puede permitirse ir por la vida en plan nihilista y pensando que no hay mañana? Nosotras no”
La banda donostiarra Nakar no se conforma con reflejar el espíritu de la época. Lo invoca para tratar de arrancarlo de las garras del derrotismo con su pospunk electrónico y pasional.
Alberto
2/11/2017 21:20

Muy buen artículo.

0
0
Desahucios
Escudo social Sanitarios y sanitarias de atención primaria se unen contra los desahucios, “un problema de salud pública”
Depresión, ansiedad, empeoramiento de enfermedades crónicas o surgimiento de nuevas afecciones acompañan a los problemas habitacionales. Lo denuncian médicos de Vallecas (Madrid) y lo refrendan los estudios.
Sareb
Madrid Una rentista planea desahuciar a una pareja con tres niños en Tetuán
Su vivienda pertenecía al parque de pisos de la Sareb, que puso a subasta pública en 2023. Hoy, la nueva propietaria pretende echar a la calle a Alam y a su mujer “para arrendar la casa a un precio mucho más alto”
Argentina
Argentina “Existen solo dos géneros: fascistas y antifascistas”: las luchas LGTBIQ+ aglutinan el rechazo a Milei
Una gran movilización recorrerá centenares de localidades en Argentina y en grandes ciudades del mundo este 1 de febrero en respuesta al discurso de odio del líder ultra.
Galicia
Galicia ¿Quién es quién en Greenalia? La empresa que quiere otra celulosa en Galicia y arrasa olivares en Andalucía
Los tentáculos del entramado empresarial tras esta corporación tocan a gran parte de la oligarquía gallega. Desde medios de comunicación como 'La Voz de Galicia' hasta equipos de fútbol como el Deportivo o entidades financieras como Abanca.
Siria
Kurdistán Entre las bombas turcas y las negociaciones con el Gobierno: Rojava ante la construcción de la nueva Siria
La Administración Autónoma del Norte y Este de Siria presiona al nuevo Gobierno para crear un Estado que respete los derechos de las mujeres, descentralizado, tolerante y multiétnico.
Estados Unidos
Extrema derecha Trump anuncia un campo de concentración para 30.000 migrantes en Guantánamo en el 80 aniversario de Auschwitz
La estrategia de llevar la detención de migrantes a territorios lejanos, opacos y sin garantías de derechos también ha sido la opción elegida por la Unión Europea en el último año.

Últimas

Educación
Educación La escucha activa en la propaganda de Educación del Gobierno Vasco
El Departamento, que nunca se pone en contacto con el profesorado, nos escribió una carta tratándonos como “compañeras y compañeros” a raíz de la convocatoria de huelga
El Salto Radio
El Salto Radio Árboles contra el desierto
Las señales de hoy no sólo quieren hablar de árboles y bosques, de reforestación, de recuperar nuestros entornos maltratados. También pretenden sembrar un poquito de esperanza ante tanta desolación, porque hay muchas cosas que podemos hacer, que ya s
Más noticias
Crisis climática
Parlamento Ciudadano Climático Un jurado popular ciudadano para combatir la crisis climática y el retroceso democrático
En un momento crítico para la democracia y la acción climática, cinco organizaciones medioambientales reunieron en el Congreso de los Diputados a científicos, actores sociales y asambleístas para impulsar un Parlamento Ciudadano Climático Permanente.
Pensiones
Revalorización de las pensiones Los pensionistas no se fían y salen a la calle tras el rechazo al decreto ómnibus
La Unidad de Acción de Madrid convoca a manifestarse este viernes 31 frente a la sede del PP tras la “posición negativa de la derecha ultranacionalista, sea española o catalana”.
Ayuntamiento de Madrid
Convenio colectivo Las cuidadoras ganan a Almeida: Madrid anuncia nuevos pliegos con la subida salarial pactada
Las trabajadoras de cuidados seguirán en huelga dado que “no hay nada tangible”. El anuncio afectaría a 12.000 personas empleadas por el Ayuntamiento, pero no a las 2.000 trabajadoras más convocadas a la huelga que trabajan para la Comunidad.

Recomendadas

Dana
Tres meses de la dana “Aquí no llovió casi nada”
VV.AA.
Un vecino de Benetússer explica cómo la riada arrasó y cambió para siempre las vidas de miles de personas.
Crímenes del franquismo
Isabel Alonso Dávila “El franquismo fue una máquina de fabricar miedo y dolor hasta el final”
Detenida en Granada en 1974 y 1975 por su vinculación con el movimiento estudiantil antifascista de la época ha presentado la primera querella en Andalucía por Crímenes contra la Humanidad en la dictadura franquista
Jaén
Andalucía Lopera no quiere que Greenalia especule con sus olivos
Decenas de pequeños olivareros de la Campiña Norte de Jaén podrían perder sus terrenos en beneficio de una empresa que quiere talar los árboles para instalar siete parques fotovoltaicos.
Redes sociales
Nuevas normas Meta abraza el discurso de odio y desafía la normativa anti discriminación
La plataforma de Mark Zuckerberg anunció cambios en sus normas: cuando empiecen a aplicarse, los comentarios misóginos y LGTBIAQ+fobos no violarán su política, pero existen herramientas para denunciar el discurso de odio.