Insecticidio, el ocaso de la flora intestinal del planeta

Los pequeños seres que mantienen la biosfera desaparecen a un ritmo tan poco conocido como frenético. Son la base de multitud de procesos ecosistémicos sin los que la vida desaparecería. El ser humano está detrás de su declive, especialmente con la proliferación de la agricultura industrial intensiva y los productos que esta necesita: los biocidas.

Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @pablorcebo.bsky.social, pablo.rivas@elsaltodiario.com

21 ago 2021 06:00

Una colmena de Bombus terrestris, el abejorro común, cuesta unos 30 euros en internet. Los humanos los utilizamos para la polinización de cultivos hortofrutícolas en entornos artificiales. Un invernadero de El Ejido, por ejemplo, los necesita. A ellos o a algún tipo de abeja. Se usan sistemáticamente para el cultivo de la mayoría de las hortalizas. Concepción Ornosa, entomóloga de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y especialista en polinizadores, cuenta que ha llegado a encontrarse subespecies italianas en pleno Maresme catalán, “y eso es porque los habían utilizado para polinizar cultivos”. El negocio no debe de ir mal. Se venden cada vez más, según asegura Theo Oberhuber, coordinador de proyectos de Ecologistas en Acción. Como explica, “en el cultivo bajo plástico no cuentan con polinizadores silvestres. O esa función se realiza a mano, con un pincel, o se tienen que comprar”.

Mientras la caja de abejorros llega vía mensajero a El Ejido, un agricultor castellano esparce insecticida con su tractor en campos de Valladolid. La llegada de la llamada revolución verde, en la segunda mitad del siglo XX, trajo consigo un mayor rendimiento agrícola, pero implicó el uso de técnicas y productos para que el vegetal produjese más, y más rápido, sin amenazas ni plagas. A los fertilizantes se les suman los biocidas: herbicidas, fungicidas e insecticidas. Y estos afectan al resto de otros habitantes del campo.

Los más mayores pueden atestiguar que en las siete horas en coche que existen entre el campo vallisoletano y el invernadero almeriense hay algo que ya no ocurre. Antes, faros y parabrisas quedaban impregnados de los cuerpos de gran cantidad de insectos que fallecían por el impacto contra los coches. Hoy, la cantidad es tan pequeña que a menudo no hay que usar ni el agua del limpiaparabrisas.

Apocalipsis micro

Se comparta este último hecho o no, las matemáticas siempre mandan. Un 41% de los insectos está amenazado y podría extinguirse en cuestión de décadas debido a las “dramáticas tasas de disminución de poblaciones”, con un tercio del total en “grave peligro de extinción”. No es que lo diga un estudio en concreto, lo dice el trabajo, publicado en la revista Biological Conservation en 2019, que revisa otros 73 informes sobre la reducción de biomasa de insectos.
Insecticidio 02
“Sin ellos el mundo estaría cubierto de excrementos, porquería, animales muertos y muchas más cosas”, explica el entomólogo de la Universidad de Sidney

Francisco Sánchez-Bayo, ecólogo asentado en la Universidad de Sídney (Australia), es uno de los dos responsables del mencionado informe, un documento que apuntaló las últimas dudas sobre la extinción masiva de insectos actual. “Nuestro estudio es una revisión de todo lo que se ha publicado en los últimos 20 años sobre su declive”. Habla de que aún hay una importante falta de datos en muchos grupos, pero otros se conocen muy bien, especialmente los más visibles, como las mariposas o los escarabajos. Son los que han estudiado, comparando las poblaciones actuales con las de hace medio siglo. Y los resultados son duros: se han dado disminuciones de poblaciones “del 50% o más” en varias especies de mariposas o polillas. En términos humanos, sería el apocalipsis.

La crisis de los insectos se enmarca en la llamada sexta extinción, que engloba a todo el reino animal y vegetal y tiene en la pérdida de ecosistemas, la contaminación, las especies invasoras y el cambio climático sus principales causas. Todas, claro, se concentran en una: la actividad humana.

La crisis es global y las cifras, aterradoras. Entre 1970 y 2016, las poblaciones de especies de vertebrados han disminuido una media del 68%, según señala el informe Planeta Vivo 2020, de WWF. Pero en el reino de los insectos, lo es aún más: “Los insectos tienen una tasa de extinción ocho veces mayor que mamíferos, aves y reptiles”, señala Oberhuber.  Los ejemplos están por doquier. En Alemania, un estudio publicado en la revista científica PLOS alertaba de disminuciones del 75% de la biomasa total de insectos voladores de las áreas protegidas del país. Se había producido en tan solo 27 años, entre 1989 y 2016.

Otra investigación, en este caso firmada por la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas, habla de importantes reducciones de las poblaciones de abejas y mariposas en el continente europeo. Del 37% y el 31%, respectivamente. Como expone la entomóloga de la UCM, “un 46% de las especies de abejorros en Europa están amenazadas”.

El Europarlamento recordaba que varios estudios habían catalogado el imidacloprid “como una sustancia tóxica para la reproducción y un alterador endocrino que puede afectar negativamente al corazón, el riñón, la tiroides y el cerebro”

Si se quieren ejemplos más cercanos, en el caso español no se puede decir que no se hubiese lanzado la alarma hace tiempo. En 2013, una investigación alertaba de la pérdida para siempre de siete de las 73 especies de la reserva natural de El Regajal-Mar de Antígola, con otras 27 en grave declive. Y en los Pirineos, nueve de las 37 especies de abejorros ya han desaparecido, según investigaciones en las que ha participado la propia Ornosa. En relación a los polinizadores ibéricos, “se estima que el 40% está en peligro de extinción”, señala Oberhuber.

Excrementos perennes

La humanidad no es consciente de lo que es un mundo sin insectos. La entomóloga califica de “inimaginable”un planeta sin ellos. De la desaparición de miles de especies de plantas por la falta de polinizadores a un mundo cubierto de mierda —en el sentido literal de la palabra—, la pérdida de fertilidad del suelo o la extinción de los predadores de los insectos. “Sin ellos, el mundo estaría cubierto de excrementos, porquería, animales muertos y muchas más cosas”, explica el entomólogo de la Universidad de Sídney.

El reciclado de los ecosistemas y la degradación del material orgánico son labores fundamentales de los insectos. Los animales muertos son devorados por ellos tras los carroñeros. Moscas y escarabajos se alimentan de heces y animales en descomposición. Si el ecosistema está sano, no se produce un reciclado como el de Ecoembes: este es total. Su papel como descomponedores fertiliza además los suelos, consumiendo y digiriendo hongos, así como materia vegetal y animal, para descomponerla en sustancias que enriquecen el suelo y proveen de alimento a las plantas.

desaparicion insectos hormigas Insecticidio
Las dos grandes amenazas para los insectos, según Theo Oberhuber, están ligadas a la actividad agraria intensiva. David F. Sabadell

Otro de sus papeles fundamentales es la polinización. “La mayor parte de las plantas con flores son polinizadas por insectos”, explica Ornosa. Y en su gran mayoría, esta función la realizan las abejas. No hablamos solo de la abeja de la miel. “Se calcula que hay 17.000 especies de abejas —cuatro veces más que mamíferos—, y la melífera es solo una”, continúa la especialista.

“Hay que explicar a los agricultores que, en el fondo, son prisioneros de esos productos porque cada vez tienen que echar más”, dice Theo Oberhuber

Si bien en este grupo de insectos se cuelan algunas mariposas, escarabajos y algunos animales más, incluidos algunos murciélagos, son las abejas las responsables de entre el 90 y el 95% de la polinización. “Tienen unas características morfológicas distintas al resto de animales que les sirven para recolectar néctar y llevarlo a sus nido”, explica la entomóloga, lo que incluye “unos cestitos especiales que las hacen absolutamente únicas”.

Por supuesto, los agricultores se benefician de ellas, ya que la mayoría de los cultivos dependen de los polinizadores. Como explica el especialista de Ecologistas en Acción, “sin ellos no vas a poder comer manzanas o se van a encarecer muchísimo porque dependerán de una polinización artificial o a mano, con su coste”.

La base de la cadena

“No nos damos cuenta de que son fundamentales para los ecosistemas”, cuenta Sánchez-Bayo. Desde las antípodas enumera las cadenas tróficas que se romperían: el 60% de los pájaros depende de los insectos porque son su alimento. A ello hay que sumarle, entre otros grupos, sapos, lagartos y la mitad de los peces del planeta, con larvas de insectos como alimento. “Incluso mamíferos: erizos, osos hormigueros, murciélagos… Eliminarlos supone que todos estos animales desaparezcan”.

Es algo que ya está pasando. Un estudio publicado en Nature asociaba directamente el uso de pesticidas neonicotinoides con el declive de las aves en Holanda. Es una cadena que ni siquiera alcanzamos a imaginar dónde acaba, y es global. Como señala Ornosa, “no hay red ecológica donde los insectos no estén representados en todos los niveles”.

insecticidio mariquita
Un tercio de las especies de insectos están en grave peligro de extinción. Álvaro Minguito

Las causas de este desastre son conocidas. Solo el 2% de los insectos tienen efectos ‘negativos’ para el ser humano, pero la búsqueda de su eliminación abarca mucho más. Yolanda Picó, química e investigadora de la Universitat de València y especialista en toxicidad de los biocidas, explica que, en general, estas sustancias son compuestos diseñados para eliminar seres vivos. Sin embargo, “digamos que no son tan selectivos y, si eliminan a un insecto, probablemente eliminen también toda una serie de insectos beneficiosos”.

Desde Sídney, Francisco Sánchez-Bayo pone el foco en que un nueve de cada diez biocidas no son un problema, pero el restante 10% “se utiliza de continuo y en todas partes: las compañías los promueven y dan incentivos a los agricultores para quelos sigan usando”. De hecho, cada año es peor. “Los insectos crean resistencias y hay que añadir cada vez más sustancias”, explica Picó, quien no comparte el dictamen del entomólogo sobre ese 10%: “El problema está en todos, se han diseñado para eso”.

La especialista asegura, sin embargo, que se ha mejorado mucho en la Unión Europea. “Hace unos años se hizo un cribado de todos los pesticidas que se utilizaban para eliminar los más tóxicos y se prohibieron muchos”. Es el caso de la atrazina o muchos neonicotinoides, sustancias que afectan al sistema nervioso central, causando parálisis en el animal.

Tóxicos y lobbies

La concienciación sobre la desaparición de las abejas llevó a que en 2013 la UE comenzara a limitar neonicotinoides como la clotianidina, el imidacloprid y el tiametoxams, insecticidas utilizados en 140 tipos de cosechas por todo el mundo, ampliando su prohibición en 2018 a todo cultivo al aire libre. Sin embargo, en junio el Parlamento Europeo aprobó una resolución que pedía una nueva evaluación científica y consideraba que la evaluación del riesgo del imidacloprid había sido “deficiente”.

“En principio, la legislación es estricta y se sigue, pero cuando más dinero tienes más capacidad tienes para realizar estudios y para presentarlos de una manera adecuada, y ahí existe una cierta capacidad de lobby [de la industria]”, apunta la química.

Francisco Sánchez Bayo lanza un mensaje: “Somos consumidores y como tal tenemos que exigir que los productos que compramos utilizan el mínimo de pesticidas”

El Europarlamento también recordaba que varios estudios habían catalogado el imidacloprid “como una sustancia tóxica para la reproducción y un alterador endocrino que puede afectar negativamente al corazón, el riñón, la tiroides y el cerebro y puede provocar síntomas neurológicos, como insuficiencia respiratoria y la muerte”. Precisamente, ese mismo mes tenía lugar un debate sobre la propuesta de utilizarlo para acabar con los parásitos de los salmones en las piscifactorías de Gran Bretaña. “Habrán hecho estudios y las compañías dijeron que no era peligroso para los peces porque tenía solo cierto nivel de toxicidad. Pero claro, en el agua no solo están los salmones”, añade Sánchez-Bayo.

abeja desaparcion insecticidio
Los polinizadores son clave para el equlibrio demultitud de sistemas ecosistémicos, incluidos nuestros cultivos. Álvaro Minguito

Las dos grandes amenazas, para Theo Oberhuber, están ligadas a la actividad agraria. Además de los biocidas, señala los cambios de uso del suelo y la continua pérdida de hábitats por la expansión agrícola, que deja sin su espacio a insectos que han evolucionado para adaptarse a medios concretos. “La agricultura, con las famosas concentraciones parcelarias, se ha ido intensificando y ha supuesto la destrucción de hábitats de muchas especies”. Por su parte, Sánchez-Bayo añade que “la agricultura intensiva supone la deforestación de bosques originales y zonas arbustivas”, remarcando que la tala masiva para macroexplotaciones intensivas en países como Brasil, Indonesia o varias naciones tropicales africanas supone la causa fundamental en el ecocidio de los insectos en dichos lugares.

Además, junto a las especies invasoras transportadas por el ser humano, que desequilibran los ecosistemas, el cambio climático se suma al cóctel, favoreciendo la proliferación de algunas “especies plaga”. “En los bosques, en concreto, se ha demostrado que les afecta mucho la falta de humedad. Con el calentamiento se evapora del suelo y muchas de las larvas que viven allí mueren”, explica a El Salto el entomólogo.

Modelo agrario

Hecho el diagnóstico, faltan soluciones. Theo Oberhuber incide en la necesidad de cambiar el modelo agrario y favorecer una transición a una agricultura más ecológica, que limite al máximo el uso de fitosanitarios: “Hay que explicar a los agricultores que, en el fondo, son prisioneros de esos productos porque cada vez tienen que echar más”, dice, algo que también ocurre con los fertilizantes.

Picó, por su parte, insiste en aplicar mejor los productos, un mayor control de las sustancias permitidas y el uso de sustancias más dirigidas a una plaga en concreto y que sean menos tóxicas para el resto. “Hay productos muy prometedores, pero están en una fase experimental o no se han generalizado entre los agricultores”, apunta. El cumplimiento y la ampliación de normativas que mejoren la situación, tales como no fumigar en periodos de floración, también son claves para la investigadora.

“Hay que utilizar las especies naturales depredadoras de estos insectos, así como los parásitos, para controlar las plagas”, afirma Sánchez-Bayo

Incidiendo en que lo principal es controlar el uso de biocidas y promover una agricultura más sostenible, Ornosa habla de restaurar la flora autóctona. “No hay que quitar las malas hierbas de las ciudades, que en realidad no lo son, sino que son la flora autóctona; hay cantidad de seres que las utilizan”.

Sánchez-Bayo, por su parte, apuesta por el control integrado de plagas, como se conoce al uso de métodos naturales para prevenirlas. “Hay que utilizar las especies naturales depredadoras de estos insectos, así como los parásitos, para controlar las plagas”, afirma. “Son cosas que se conocen bastante bien en muchos casos, pero hay que implementarlas”.

Existen además soluciones más simples. Como plantea Oberhuber, “hay cosas superfáciles; por ejemplo, en los años 60 las cunetas y los terrenos cercanos a las carreteras eran silvestres y una zona con una altísima densidad de plantas silvestres. Al final son muchas hectáreas, y todo eso ha desaparecido”. Es una solución que se está implantando en Alemania.  

También en el entorno urbano hay opciones, como la iniciativa holandesa de plantar especies silvestres sobre las marquesinas de autobús. Favorecer especies autóctonas en la jardinería de las ciudades en vez de plantas ajenas al medio en concreto, “algo que además cuenta con un presupuesto importante”, recuerda Oberhuber, ayudaría asimismo a incrementar la biomasa de insectos de pueblos y ciudades. Y volviendo al campo, la implantación de zonas arbustivas o silvestres en los lindes de los cultivos sería un paso de gigante, explica.

Por último, Francisco Sánchez Bayo lanza un mensaje: “Somos consumidores y como tal tenemos que exigir que los productos que compramos utilizan el mínimo de pesticidas”. Ahora, a trabajar.

Biodiversidad
Homo sapiens, asesino ecológico en serie
La última desaparición global y masiva de biodiversidad no fue la del Cretácico y los dinosaurios. Bienvenidos a la sexta extinción.
Cargando valoraciones...
Ver comentarios 6
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

Asturias
Las Seis de la Suiza consiguen el tercer grado penitenciario a la espera del indulto prometido por el Gobierno
Las sindicalistas podrán cumplir su condena en régimen de semilibertad y durmiendo en la cárcel. Se prevé que las manifestaciones continúan a la espera del indulto prometido por la vicepresidenta Yolanda Díaz, aún sin fecha de posible aprobación.
Laboral
Legislación laboral en condiciones de calor extremo: existe pero ¿se aplica?
Los sindicatos y expertos demandan mejoras en los reglamentos, que muchas veces dejan en manos de la buena voluntad de las empresas aplicar medidas de protección en alertas meteorológicas.
Portugal
La derecha y la extrema derecha portuguesas acuerdan una ley antimigrantes sin precedentes
El Parlamento luso aprueba una ley que endurece los requisitos para la obtención de nacionalidad a los extranjeros, incluyendo a los lusófonos, y limita extraordinariamente los supuestos de reagrupación familiar.
El Salto n.79
Galicia dice 'no' al capitalismo verde y en el último número de la Revista El Salto te lo contamos
Ya está disponible el número 79 de nuestra revista, en el que destacamos la investigación y el rechazo social que encuentra el proyecto de macrocelulosa de la multinacional Altri.
Euskal Herria
La transferencia a Euskadi de los subsidios de desempleo se atasca
La reunión entre Pradales y Sánchez ha servido para pactar el traspaso de algunas prestaciones familiares, pero aún no ha prosperado la negociación sobre los subsidios de desempleo con el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Incendios
El vecindario de la Cañada responsabiliza del incendio a Ayuso y denuncia la actuación de Emergencias
Un total de 19 dotaciones de Bomberos acudió a sofocar un incendio en el sector 6, afectado por cortes de luz desde 2020, como vienen denunciado vecinos y organizaciones.
Grecia
Grecia muestra su peor cara ante el aumento de llegadas de personas migrantes a Creta
El país heleno suspende, durante los próximos tres meses, los procedimientos de asilo para las personas migrantes que lleguen por mar desde el norte de África.
Torrejón de Ardoz
Torrejón clama justicia por Abderrahim un mes después de que muriera asfixiado por un policía de Madrid
La plataforma Justicia por Abderrahim ha querido sacar músculo en las calles de la ciudad y honrar la memoria del vecino magrebí fallecido estrangulado por el agente municipal.
Palestina
El ataque de Israel a una iglesia indigna al Gobierno francés, que sigue sin hacer nada contra el genocidio
Eslovenia se convierte en el primer país europeo en prohibir la entrada y en imponer sanciones contra jerarcas del régimen de Tel Aviv.

Últimas

Comunidad El Salto
El Salto estrena nueva página: una web como una casa
Después de un año de trabajo, lanzamos en julio la nueva web de El Salto, con un nuevo diseño, pero, sobre todo, con una nueva Zona Socias llena de ventajas para las personas que hacen posible El Salto con su apoyo.
Cómic
Simon Hanselmann y el arte de lo obsceno
Simon Hanselmann se ha convertido en el verdadero ‘enfant terrible’ del mundo del cómic ‘underground’. Un artista de lo obsceno, titiritero del universo gestado en torno a los incorregibles Megg, Mogg y Búho.
Región de Murcia
Más de mil organizaciones piden que se castiguen los discursos de odio que incentivan las agresiones racistas
Colectivos sociales, migrantes y antirracistas convocan concentraciones en decenas de ciudades para mostrar el rechazo ante las agresiones racistas y xenófobas en Torre Pacheco y exigir responsabilidades a los incitadores.
El Salto Radio
Yupanqui, la música en colectivo
Jóvenes con raíces latinoamericanas generan espacios de encuentros y formación en Madrid.
Región de Murcia
Bulos y algaradas: la estrategia internacional para promocionar el supremacismo
La campaña en redes de Torre Pacheco ha replicado el modus operandi que instigó los disturbios racistas de Inglaterra el pasado verano.
Estados Unidos
No es una guerra de Trump contra el fentanilo, es una guerra contra los pobres
Donald Trump revive la War On Drugs firmando una nueva ley que establece penas mínimas de diez años contra los traficantes del opiáceo.
Más noticias
Justicia
Organizaciones civiles y de derechos humanos piden protección para el hijo menor de Juana Rivas
Consideran la orden de entrega del hijo menor de Juana al padre como una grave desprotección infantil al ignorar el proceso penal italiano por presunto maltrato contra Arcuri y la minimización previa de las denuncias de violencia del hijo mayor
Francia
Francia se ensaña con los más desfavorecidos con su nueva batería de recortes
El primer ministro galo, François Bayrou, quiere congelar pensiones, ayudas sociales y salarios de funcionarios con un agresivo plan de austeridad que deja indemnes a los más ricos.

Recomendadas

Pensamiento
Nuria Romo
“Los procesos de medicalización no son neutros, se hacen sobre todo hacia las mujeres”
Catedrática de Antropología Social y Cultural, Nuria Romo Avilés lleva más de dos décadas compaginando la investigación con perspectiva de género acerca de drogodependencia con la docencia en la Universidad de Granada.
Comunismo
Jodi Dean
“Sin organización, los movimientos surgen y desaparecen como setas”
La politóloga e historiadora Jodi Dean ha estado en Barcelona para reivindicar el poder de las organizaciones políticas y de la camaradería. En la actualidad trabaja sobre el neofeudalismo y la reconfiguración de la clase trabajadora.
Arte contemporáneo
Palabras contra el poder: la vigencia radical de Barbara Kruger
La primera retrospectiva completa de Barbara Kruger en España presenta los distintos formatos y soportes con los que ha trabajado en las últimas cinco décadas: ‘paste-up’, instalaciones de vídeo, obras en LED y vinilos murales.
Málaga
Málaga, el punto de inversión para los fondos israelíes a pie de playa
Diversos fondos de origen israelí están presentes en proyectos urbanísticos de Málaga influyendo en la turistificación de la provincia mientras se enriquecen con la ocupación de Palestina
Comentarios 6

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...