COP26
La paradoja de género en la COP26

Desde la COP de Kioto en 1993 a Glasgow se han producido, gracias al feminismo, cambios sustanciales, pero aun hoy la presencia de mujeres sigue siendo insuficiente, especialmente en los espacios donde se pueden alcanzar acuerdos significativos.
COP26 Feminismo
Activista de Ecologistas en Acción y de la Women and Gender Constituency
5 nov 2021 09:08

Como mujer joven y feminista, venir a la COP26 es subirse al carro de las ecofeministas históricas que siguen al pie del cañón al día de hoy. Cuando preguntas a las mujeres que llevan muchas COPs (Conferencia de las Partes o Conferencias de Clima de Naciones Unidas) a sus espaldas, todas coinciden en lo mismo: el cambio en la representación es sustancial. Cuentan que, por no tener, en tiempos de Kyoto no tenían ni espacio propio, ni físico ni simbólico. El grupo que conformaban, era absolutamente informal, muy lejos del actual WGC (Women and Gender Constituency), uno de los grandes grupos aglomerantes de la sociedad civil presente en la COP26. 

Los números no mienten: la cosa está mejor, pero aún quedan capas de morado que aplicar a una cumbre que sigue estando dominada por señoros. Lo que UN Women llama “la paradoja COP26”. En esta conferencia un 45% de los miembros de los equipos negociadores son mujeres, pero la mayor parte de las cabezas de negociación son aplastantemente masculinas. De los seis comités que coordinan los fondos bajo el paraguas de UNFCCC (Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático) que es, no nos engañemos, donde se mueve lo que realmente puede llegar a hacer una diferencia, sólo uno ha alcanzado la paridad.

De igual forma, los porcentajes de mujeres en la cúspide de las decisiones climáticas son bajos. Esto se debe a que la presencia de mujeres ministras en ministerios relacionados con el cambio climático sigue siendo muy minoritario (7,3%  en el Ministerio de Medioambiente, 1%  en Transporte, 3,8% en Agricultura y 1,6% Hacienda). Sólo en las carteras de Asuntos Sociales y Familia (asombro bajo la mascarilla) las mujeres ocupan un 13,6% de los puestos ministeriales.  

La publicación del informe sobre el progreso de la integración de la perspectiva de género en los cuerpos de la UNFCCC en agosto 2021, dibuja una perspectiva similar. Aunque existen algunos organismos que sí han integrado de manera relevante la perspectiva de género, en muchos casos los compromisos de los documentos oficiales se han quedado en papel mojado. O lo que es lo mismo: mucho bla, bla, bla y poco resultado. Además, los cuerpos constituyentes se han concentrado en destacar los triunfos, pero se han despistado un poco más en señalar lo que queda por hacer y mejorar.

Si algo se puede destacar en los inicios de esta COP26 es la dificultad de acceso para la sociedad civil, especialmente para las organizaciones de los países con bajos ingresos. Empezando por la exigencia de tener la dosis doble de la vacuna covid, cuando en muchos países no ha habido disponibilidad ni para tener la primera. Las limitaciones económicas para venir hasta Glasgow y los precios prohibitivos de alojamiento tampoco han ayudado. Y después de esto, las mujeres de la sociedad civil de los países de bajos ingresos que han logrado aterrizar en Glasgow, se encuentran con que el acceso a los procesos oficiales de negociación está altamente limitado por aforo COVID y que las colas por las mañanas hacen literalmente imposible llegar a tiempo a tiempo a las pocas a la que la Convención Marco concede acceso. 

La verdad que yo solo puedo decir una cosa al respecto: vaya ocasión perdida para contar con las mejores mentes y perfiles en esta escueta oportunidad que tenemos para arreglar el barrizal climático en el que nos hemos metido. Trabajar en este frenético microcosmos de la COP con las mujeres que lideran el movimiento ecofeminista en diferentes partes del mundo, es un espacio privilegiado para ver a mujeres tremendamente válidas e inteligentes en acción. Las feministas exprimen sus espacios de representación en la COP hasta la última gota y luchan dentro y fuera de las instituciones por nuestra casa común. 

¿Qué sería de ciertos temas si nos los pusieran en la agenda los movimientos feministas? 

Lo primero es que, casi seguro, el lenguaje de género y derechos humanos quedaría casi fuera de los textos acordados, si no excluido completamente. Puede parecer banal, pero las palabras que no consten en un documento de acuerdo internacional, no podrán ser reclamadas posteriormente en términos legales. O sea: si no hay mención de género y derechos humanos en los acuerdos climáticos, aceptamos sin tapujos acciones nacionales y empresariales que supuestamente benefician al planeta, pero que son devastadoras para pueblos indígenas y pobladores o incrementen las desigualdades sociales y de género de las comunidades a las que afectan. 

Además, habría temas que ni siquiera podrían llegar a pasar la puerta de algunos despachos de universidades. Las mujeres mueren más en los desastres naturales, sufren más pobreza energética, representan el 80% de las y los desplazados climáticos; pero también lideran movimientos de resistencia indígena y suponen un eje fundamental de tejido comunitario y cuidados de las personas y del medioambiente.  Las niñas pierden escolarización cuando tienen que ir a por agua lejos en casos de sequía, y también cuando no hay condiciones higiénicas adecuadas en las escuelas. Pero también son las niñas las que mueven a sus comunidades y a los movimientos juveniles por el clima. Y son las feministas las que ponen encima de las mesas de negociaciones la necesidad de movilizar fondos y proyectos para atajar las inequidades de género del impacto del cambio climático. 

Por supuesto, sin las feministas los números de representación de las mujeres, serían aún más desalentadores de lo que ya son. Si algo enfatizamos las mujeres jóvenes feministas es que nosotras ocupamos  espacios de representación gracias a las que lucharon antes, y que, aunque en la cumbre los números aun no van a nuestro favor, sin la tenacidad de las que en las primeras cumbres reclamaron su espacio físico y metafórico, nosotras no podríamos estar abriendo camino para las que vendrán después.

Pero sobre todo se perderían algunas de las voces más directas y sinceras que se encuentran en un espacio en el que decir verdades a medias es parte de la agenda política. Se apagarían los discursos que aprietan las tuercas de los que se sientan en las salas cerradas al público. Se velarían las perspectivas apasionadas de aquellas que tienen los cuidados como bandera, más allá de cualquier interés económico.  

Gracias a las feministas que estuvieron, las que están y las que estarán por poner la vida en el centro también en la COP26.


Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Ecofeminismo
Cuando la ciencia y el feminismo se encuentran en la naturaleza. Carson y Margulis sembraron ecofeminismo.
Rachel Carson y Lynn Margulis desafiaron el pensamiento dominante y patriarcal.
Córdoba
Red transfeminista La RATA cordobesa se consolida con un evento en forma de “perolada”
La Red de Autodefensa Transfeminista (RATA) ha organizado el pasado 15 de marzo una jornada de actividades como espacio alternativo ocio, existencia y resistencia en el centro social autogestionado Rey Heredia de Córdoba.
Granada
8 de marzo Diez mujeres que dan la cara por Granada
Marta, Roxana, Margarita, Olalla, Silvia, Lola, Saskia, Laura, Loli y Bethlehem son las voces visibles de algunas de las muchas luchas sociales, medioambientales y en defensa de los derechos humanos que se libran en Granada
Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Economía social y solidaria
ESS Los colectivos migrantes y racializados están construyendo su propio espacio en la Economía Social y Solidaria
A pesar de que se ha avanzado mucho, según los datos existentes, solo un 7% de las personas trabajadoras en la economía solidaria son migrantes o racializadas mientras representan más de un 20% de la población.
Migración
Migraciones Recortes, despidos y desamparo: la crisis en los centros de acogida gestionados por Rescate Internacional
Usuarios, voluntarios y trabajadores vinculados a la ONG denuncian condiciones indignas, reducción de costes y falta de atención básica en los dispositivos gestionados por la entidad, que se financia con fondos públicos.
Fronteras
Fronteras 24 horas en un albergue de Tijuana: “Que no se olviden de nosotros”
Unos 80 migrantes siguen con preocupación la política de cerrojazo y militarización de la frontera de Donald Trump desde sus casas de nylon.
Salud
Enfermedades raras La enfermedad de Huntington: los rostros de una dolencia invisible
Hace 32 años se descubrió el gen responsable de la enfermedad de Huntington. Desconocida entre ciudadanos y sanitarios, se hereda en un 50% de los casos cuando uno de los progenitores la tiene.
Salud mental
Salud mental Sanidad consigue que se apruebe el plan de salud mental que apuesta por la deprescripción de algunos fármacos
Ministerio y comunidades autónomas acuerdan el plan que incluye la disminución en el consumo de psicofármacos, un aumento en las plantillas y una mejora en las garantías de los derechos de las personas con sufrimiento psíquico.
Teatro
Teatro ‘1936’: una herida abierta sobre el escenario
La nueva producción dirigida por Andrés Lima convierte la Guerra Civil en materia escénica, abriendo un espacio de reflexión crítica sobre sus huellas en el presente.

Últimas

Formación El Salto
Formación Masculinidades neoliberales: afectos de odio, cultura bro y extrema derecha
Abiertas las inscripciones para esta nueva propuesta de formación online, que abordará la relación entre el fortalecimiento de las derechas, el avance de un neoliberalismo desbocado y la aparición de culturas de género cada vez más conservadoras.
Palestina
Palestina El asedio de Israel deja a la población de Gaza sin panaderías
Los ataques israelíes desde que el régimen de Tel Aviv rompió el alto el fuego se han cobrado ya más de mil doscientas víctimas. La situación de hambre es trágica en el territorio de Gaza.
Comunidad de Madrid
Los Molinos Archivada la investigación del incendio del coche de un activista y concejal: “Fue intimidación terrorista”
El sobreseimiento y archivo del caso no llegó a notificársele al activista, según Ecologistas en Acción, y este no pudo enterarse de la medida hasta pasados siete meses de la decisión judicial, cuando se personó en el juzgado.
Bilbao
Bilbao La Ertzaintza desaloja el gaztetxe Etxarri II en el barrio bilbaino de Rekalde
Noche de cargas policiales en Bilbao. Cinco personas fueron detenidas cuando trataban de evitar el desalojo del edificio, que se ha producido hoy a las 11h. A las 19h hay convocada una manifestación desde el parque de Amezola.
Argentina
Análisis Argentina vuelve a entrar en crisis: el nuevo rescate financiero del FMI
A pesar del brutal recorte realizado por el Gobierno de Javier Milei, Argentina ha vuelto a recurrir al FMI para hacer viable su plan económico ultraliberal. La crisis social y económica está servida.
Opinión
Tribuna Sobre las movilizaciones del 5 de abril contra el negocio de la vivienda y por salarios y pensiones dignas
VV.AA.
El 5 de abril salimos a la calle a favor de salarios y pensiones mínimas dignas, lo que servirá también para fortalecer el movimiento por la vivienda y generar nuevas condiciones para tejer alianzas.
Barcelona
Crímenes del franquismo La Fiscalía acepta una denuncia por torturas durante el franquismo por primera vez en la historia
Blanca Serra, militante catalanista y víctima de torturas en la comisaría de Via Laietana, será la primera persona en prestar declaración ante la Fiscalía de Memoria Democrática, más de dos años después de la aprobación de la nueva ley.

Recomendadas

Andalucía
Derecho a la vivienda Andalucía se une a la movilización del 5 de abril con el precio de la vivienda en su máximo histórico
Sevilla, Málaga, Granada, Cádiz y Almería se unen a la manifestación estatal contra el negocio de la vivienda mientras el precio del alquiler en Andalucía alcanza sus máximos históricos y se ejecutan 157 desahucios mensuales en la comunidad
Madrid
Especulación urbanística La Operación Chamartín encara su paso final: “Desde el punto de vista del diseño urbano, es una bestialidad”
Madrid Nuevo Norte es una realidad desde que el pasado diciembre Adif y RENFE traspasasen sus terrenos a la sociedad promotora y este marzo se aprobase el proyecto de urbanización del primer sector urbanístico.
Literatura
Belén Gopegui “Cada vez va a ser más importante crear movimientos en defensa de espacios analógicos”
En su última novela, ‘Te siguen’, la escritora indaga en las implicaciones políticas del colapso de la privacidad y los tozudos márgenes de acción donde se sigue dando batalla a la impotencia.
Galicia
Vivienda ¿Por qué no nos atrevemos a hablar de rentismo popular? Cuando tu casero no es un fondo buitre
Activistas y especialistas abordan la incidencia y la responsabilidad de los pequeños propietarios en el problema de la vivienda en Galicia, donde es especialmente incidente, y en el resto del Estado.