Magreb
La Túnez marginada se rebela contra los recortes

Durante los últimos dos días, las manifestaciones contra el aumento de los impuestos en Túnez han desembocado en violentos enfrentamientos con la policía en una veintena de ciudades en regiones marginadas. El balance es de un manifestante muerto, decenas de heridos y al menos 200 personas arrestadas.

Túnez manifestación
Manifestación en Túnez el 20 de enero de 2011, tras la caída de Ben Alí. Foto: Chris Belsten
Túnez
10 ene 2018 14:59

Los vientos de revuelta vuelven a soplar con fuerza en Túnez, el país que hace exactamente siete años desencadenó la llamada "Primavera Árabe" al desembarazarse del régimen del dictador Ben Alí. Durante los últimos dos días, las manifestaciones contra el aumento de los impuestos recogido en la Ley de los Presupuestos por 2018 han desembocado en violentos enfrentamientos con la policía en al menos una veintena de ciudades, todas ellas pertenecientes a regiones o barrios marginados. Las movilizaciones han puesto contra las cuerdas al Gobierno, que ha desplegado el Ejército en los puntos más calientes. De momento, el balance es de un manifestante muerto, decenas de heridos y al menos 200 personas arrestadas, según el Ministerio del Interior.

Esta no es la primera ola de protestas sociales que sacude los cimientos del país magrebí desde la Revolución de 2011. A pesar de haber superado con éxito las principales fases de su transición democrática –se aprobó una Constitución por consenso y se han celebrado varias elecciones libres–, algunos de los problemas más graves que afectaban al país durante la era Ben Alí permanecen vigentes. En estos años, ninguno de los gobiernos electos ha sido capaz de reducir las escandalosas desigualdades entre las regiones más ricas y las más pobres del país, de combatir la lacra de la corrupción o de ofrecer perspectivas de futuro a una juventud alienada.

Precisamente, el paro juvenil, que en las zonas marginadas se eleva hasta el 40%, es el problema de fondo que estimula las actuales movilizaciones. Su desencadenante ha sido la aprobación de un presupuesto marcado por la austeridad que provocará un encarecimiento de diversos productos y servicios, como las llamadas telefónicas, la gasolina o el chocolate. La inflación ha ido escalando progresivamente los últimos años, y ahora ya se sitúa por encima del 6%, mientras los salarios siguen estancados.

"La Ley de los Presupuestos condensa los principales problemas del país: el encarecimiento de los precios, la falta de trabajo, el deterioro de los servicios públicos ... Por eso nuestra demanda central es su retirada", explica en Wael Nauar, uno de los seis fundadores del movimiento Fesh Nastanneu? ("¿A qué esperamos?", en dialecto tunecino), que ha organizado las manifestaciones de los últimos días.

Si bien el epicentro de la revuelta es en el corazón del país, cientos de personas, la mayoría jóvenes, se concentraron el lunes al mediodía en la céntrica avenida Bourguiba, uno de los escenarios principales de la Revolución. "¡El pueblo quiere la caída del presupuesto!", fue el lema más popular entre los asistentes, una ligera variación del que electrificó las masas árabes hace siete años. En el discurso ante la multitud que ofreció Nauar, un chico bajo y delgado que luce una barba descuidada y un viejo gorro de lana, también ocupó un lugar importante la denuncia de la represión policial.

Los gritos de "¡Ministerio del Interior, ministerio terrorista!" resonaron con fuerza en el momento en que tomó la palabra Zeinab bin Ahmed, una activista de Tebourba, la localidad donde falleció la única víctima de la crisis actual. La chica desmintió la versión difundida por las autoridades tunecinas, que asegura que la muerte de Khomsi al-Yerfeni, un desempleado de 43 años, fue provocada por una enfermedad respiratoria crónica. "La manifestación era pacífica desde las tres de la tarde. De repente la policía nos empezó a lanzar gases lacrimógenos, y nos rodearon. Al intentar dispersarnos con los coches, arrollaron en Khomsi ante nuestros ojos", explicó a El Salto una vez acabada la manifestación.

La reacción del Gobierno

El Gobierno tunecino reaccionó como suele hacer en estos casos: pidiendo paciencia a la población y deslegitimando los manifestantes. Mientras el primer ministro, Youssef Chahed, afirmó que 2018 sería "el último año difícil para los tunecinos", el portavoz de Interior calificó de "vandalismo" las protestas, recordando que se dañaron edificios públicos y se asaltaron algunos comercios. "Nosotros, en el Gobierno, decimos a los que rompen cosas y a los que les incitan que la única solución es la aplicación de la ley. Estamos dispuestos a escuchar pero todo el mundo que quiera manifestarse debe hacerlo pacíficamente ", advirtió Chahed en declaraciones a una emisora de radio local.

Sin embargo, desde Fesh Nastanneu? se desvincularon de las acciones violentas, incluido el lanzamiento la madrugada del martes de cócteles molotov contra una escuela de la minoría judía asentada en la isla de Yerba. “El Gobierno ha utilizado la represión y provocado los disturbios para criminalizar el movimiento, como ya hacía Ben Alí. Nosotros somos inocentes de las robos y asaltos ocurridos estos días. Nuestras movilizaciones siempre han sido pacíficas”, afirma Nauar, que trabaja como funcionario del Ministerio de Educación. Según este activista, desde la creación de Fesh Nastanneu? el pasado 3 de enero, 50 de sus miembros han sido arrestados por la Policía por el solo hecho de haber publicado manifiestos y realizado grafitis.

Túnez atraviesa una delicada situación económica desde la Revolución a causa de la caída del turismo y la inversión extranjera. Los Ejecutivos de diverso color político que se han ido sucediendo confiaron en un aumento del gasto público para relanzar la economía. No obstante, la tasa de crecimiento del PIB se mantiene alrededor del 2%, un registro insuficiente para proporcionar trabajo a los miles de jóvenes desempleados. Con la deuda pública rozando el umbral del 70%, el Gobierno ha apostado por una contención del gasto, un aumento impositivo y la firma de un crédito con el FMI para sanear las cuentas públicas.

Con la oposición dividida y fragmentada, tan solo el histórico sindicato de la UGTT puede hacer de contrapeso a la “gran coalición” de Gobierno, formada por conservadores laicos e islamistas. Para conseguir sus objetivos, Fesh Nastanneu? deberá expandir su base de apoyo más allá de los jóvenes marginados y arrastrar a trabajadores y clases medias, malhumoradas pero apáticas. Si no, esta ola de protestas pasará a la historia como otra expresión cícicla del malestar crónico de los olvidados en Túnez, para el que nadie ha encontrado aún remedio.

Archivado en: Túnez Magreb
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Análisis
Análisis Más allá del caftán: El reto de preservar el patrimonio lingüístico amazigh
La lengua amazigh es la lengua materna del norte de África. Una lengua afroasiática que fue hablada desde el archipiélago Canario hasta Egipto, abarcando una extensa línea geográfica a la que se suma el Sahel. Actualmente se halla en peligro.
Magreb
Magreb Elecciones presidenciales en el Magreb: incerteza en Túnez, apatía en Argelia
El sábado 7 los argelinos tienen una cita con las urnas, semanas después llegarán los comicios a Túnez. La ciudadanía irá a votar en un ambiente electoral marcado por el autoritarismo y los intentos de exclusión de candidatos opositores.
Magreb
Mundo árabe El norte de África abraza la bandera de Palestina
Las grandes manifestaciones vuelven a las principales ciudades del norte de África para mostrar su apoyo al pueblo palestino y colocan a los gobiernos en una difícil situación por sus recientes acuerdos con el Estado de Israel.
#6280
11/1/2018 17:41

Muy buen artículo. Resaltaría que los conservadores se unen -sean islamistas o no- en una gran coalición: "Fachas unidos jamas seran vencidos" ... ¡o si?

2
3
Reducción de jornada
Laboral El ‘obstáculo’ catalán a la jornada de 37,5 horas semanales
Frente al ‘no’ de Junts, los sindicatos desmontan los argumentos de la oposición y la patronal a lo que consideran “un avance” en los derechos de los y las trabajadoras.
Yemen
Yemen Los hutíes de Yemen, única milicia en Oriente Medio que sigue bombardeando Israel “en solidaridad” con Gaza
El grupo armado ha lanzado decenas de misiles contra territorio israelí desde que el Gobierno de Netanyahu retomó el bloqueo total de ayuda humanitaria en el enclave a inicios de marzo.
Estados Unidos
Roberto Montoya “Nos dicen que hay que armarse contra Putin cuando el mayor peligro para el mundo es Trump”
Más Donald Trump que nunca, el multimillonario ha regresado para terminar lo que no pudo hacer en su primer mandato. El periodista Roberto Montoya bucea en el personaje y su contexto en el libro ‘Trump 2.0’ (Akal, 2025).
Palestina
Ocupación israelí Miles de personas se manifiestan en Madrid contra el genocidio en Palestina
La organización cifra en 50.000 las personas asistentes a la convocatoria unitaria de todas las organizaciones que forman la Rescop, a la que se han sumado cientos de colectivos ciudadanos con una voz común: Muévete por Palestina.
La vida y ya
La vida y ya Algo más que leer
“Cuéntale hasta cuándo estuviste trabajando”, le dicen a otra. “Yo trabajé hasta los setenta y pico”, comenta sin orgullo pero sin resignación.
Cine
Cine Colectivo y sin autor: breve historia de otro cine
La película ‘Una isla y una noche’, autoproducida y autodistribuida por el colectivo francés Piratas de Lentillères, es la puerta de entrada para recordar otros modos de hacer cine, alejados de la firma de autor y los grandes estrenos.
Historia
Historia El largo viaje de Pepe Díaz
Se cumplen 130 años del nacimiento en Sevilla de una figura carismática y trágica del movimiento obrero español.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Opinión
Opinión Cinco ideas decrecentistas frente al apagón
El autor de ‘La espiral de la energía’ (Libros en Acción, 2014) reflexiona sobre las lecciones que se pueden extraer del corte de suministro eléctrico del pasado 28 de abril.
Análisis
Energía El apagón de la liberalización: cómo el mercado eléctrico ha fallado a la ciudadanía
La liberalización no ha cumplido ninguna de sus promesas y ha generado riesgos estructurales para la economía, el medioambiente y la cohesión social
Violencia machista
Violencia institucional Un observatorio registra en un año más de un centenar de casos de violencia institucional contra las mujeres
El Observatorio de Violencias Institucionales Machistas, creado hace un año, recoge 117 casos de violencia institucional contra las mujeres, la mitad de ellos cometidos por el sistema judicial.
Palestina
Ocupación Isarelí Primera movilización unitaria contra el genocidio en Palestina y por el fin del comercio de armas con Israel
Este sábado 10 de mayo se espera en Madrid una asistencia multitudinaria de personas venidas desde cientos de municipios de todo el Estado español para concentrar la protesta de los ataques indiscriminados del Israel contra la población palestina.
Más noticias
Tribuna
Tribuna Para acabar de una vez con las nucleares: sobre el último intento de prolongar la vida de las centrales
Los voceros de la nuclear han encontrado la oportunidad ideal para difundir sus bulos con el apagón del 28 de abril. Quieren generar polémica para mantener operativa una infraestructura innecesaria, peligrosa y que genera residuos incontrolables.
Laboral
Laboral Al borde de la huelga en la educación pública vasca
Los cuatro sindicatos convocantes denuncian que el Departamento de Educación vasco no se han sentado a dialogar hasta este viernes pocos días antes de los paros
Opinión
Opinión ¡A la mierda Europa!
Hay otra Europa que es víctima de la Europa neoliberal y belicista que apuesta por la industria de las armas a costa de los derechos sociales, es una Europa que se muere de vergüenza cada vez que ve imágenes de Gaza o Cisjordania.

Recomendadas

México
Recursos naturales Los “millonarios del agua” aumentan el estrés hídrico de México
Bancos españoles y grandes corporaciones obtienen beneficios del agua ante un Estado que incumple su obligación de garantizarla. Más de un millón de viviendas en México se abastecen de forma recurrente por servicios de entrega privada de agua.
Energía
Juan Bordera “En la crisis energética, el tecnooptimismo es mesiánico y juega a favor de Trump"
El diputado en Les Corts se pronuncia sobre el apagón del pasado lunes y carga contra la forma en la que se están implantando las renovables. También señala el peligro de que el sentimiento antirrenovable cale entre la población.
Galicia
Investigación Varios refugiados denuncian a la ONG Rescate Internacional por explotación laboral y agresión sexual
La Guardia Civil investiga al centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran trabajar sin contrato a cambio de 50 euros semanales. La ONG gestiona 1.700 plazas del programa estatal de acogida.
Comunidad de Madrid
Luis A. Ruiz Casero “Durante la transición la cárcel de Carabanchel albergó a más presos que en algunos años del franquismo”
De los presos franquistas que construyeron el penal, pasando por los que fueron fusilados, hasta los revolucionarios que pusieron patas arriba el centro penitenciario con iniciativas como la COPEL, Luis A. Ruiz Casero ofrece en 'Carabanchel. La estrella de la muerte del franquismo', un documentado homenaje a las luchas de las personas internas.