Tribuna
La ciudad feminista inclusiva frente a la ciudad exclusiva de Madrid Nuevo Norte

La Operación Chamartín ofrece una oportunidad para explicar las aportaciones que desde el urbanismo y la economía feminista que alertan de la hostilidad de las ciudades hacia las personas más vulnerables.

Operación Chamartín 1
Vista de la Avenida de Burgos (Madrid), bajo el puente está el terreno en el que se asentará el desarrollo urbanístico. David F. Sabadell
Instituto DM.
30 nov 2017 06:27

Madrid Necesita Feminismo es uno de los eslóganes que el Ayuntamiento de Madrid ha utilizado para promocionar las celebraciones del 8 de Marzo en la ciudad. Y es cierto que lo necesita, todos los días del año y aplicado a todos los aspectos de la vida, incluido el proyecto de ciudad financiera que constituye la Operación Chamartín.

Solo así podrá visibilizarse cómo el llamado 'capitalismo patriarcal' interviene/interfiere en las formas de vida de la ciudad en su conjunto y se impone en las lógicas que la gobiernan. Que son las mismas que naturalizan el hecho de que las mujeres cobren menos, dediquen más horas a las tareas de cuidados, tengan mayores índices de pobreza o se vean obligadas a convivir con el miedo a cruzar algunos espacios públicos a ciertas horas de la noche.

La Operación Chamartín ofrece una excelente oportunidad para condensar aportaciones que desde el urbanismo y la economía feminista alertan para el hecho incontestable de que las ciudades se han ido convirtiendo a lo largo de los últimos cien años en espacios hostiles con la vida, especialmente con las personas más vulnerables.

Este modelo económico basado en el crecimiento ilimitado está colapsando la vida y acarrea altos costes sociales y ambientales
La economía y el urbanismo feminista ponen en evidencia que, por costumbre, la economía de mercado determina las decisiones políticas y urbanas que se toman desde los espacios competentes. Y que este modelo económico basado en el crecimiento ilimitado está colapsando la vida y acarrea altos costes sociales y ambientales. De ahí la urgencia de aplicar una perspectiva feminista desde el poder público para producir ciudad bajo otros parámetros alternativos al de la ciudad económica, financiera y, por lo tanto, tradicionalmente masculinizada. Desde los paradigmas feministas se demanda que las decisiones en materia de urbanismo privilegien la satisfacción de las necesidades humanas y del ecosistema, en vez de continuar apostando por formatos de acumulación de capital financiero e inmobiliario.

Desde este enfoque, la Operación Chamartín debería ser encarada como una oportunidad para atacar varias anomalías: suturar la herida urbana que suponen las vías del tren, mejorar los barrios circundantes y las infraestructuras obsoletas, y generar viviendas públicas. Entonces se podría contar con un parque de vivienda en un entorno mixto, donde se compatibilizaran las actividades económicas –como las que ya existen en el Polígono de Malmea– con la vida cotidiana. Si mediara voluntad política, esto es perfectamente posible, más aún teniendo en cuenta que el 80% del suelo afectado es de titularidad pública.
Lo que se ha propuesto es una operación financiera de capital riesgo, con coeficientes de edificabilidad exorbitados
Sin embargo lo que se ha propuesto es una operación financiera de capital riesgo, con coeficientes de edificabilidad exorbitados. Llegados a este punto nos preguntamos: ¿Es necesaria una city financiera en Madrid? ¿Quién ha decidido esto? ¿Realmente a quién beneficia? ¿De dónde saldrán esas empresas que ocuparían esa exorbitante cantidad de metros cuadrados de oficinas? Genera desconcierto la línea de acción seguida por el ayuntamiento: primero llega a un acuerdo (aún pendiente de firma y publicación en el BOE) con la sociedad inversora, y a posteriori consultaría  a los vecinos. ¿Y si éstos no quisieran la city? ¿Y si la ciudad entera no la quisiera?

La imagen ofrecida del  Distrito de Negocios es la materialización física de la economía financiera y ejemplo clásico del capital contra la vida, del mercado contra la ciudad. La fórmula se repite en el planeta con pocas variaciones: un lugar de fantásticas torres fálicas, brillantes y transparentes, casi etéreas. Individuos idénticos lo recorren, ni demasiado jóvenes ni demasiado mayores, con plenas capacidades, sin cargas familiares que les impidan entregarse de cuerpo y alma a la reproducción del capital. Además de oficinas, espacios de consumo exclusivo: oferta gastronómica internacional, cultura y ocio nocturno que funcione las 24 horas. ¿Será tan deseable para buena parte de la gente que trabaje en ellos limpiando, o sirviendo copas, sabidamente bajo condiciones laborales frecuentemente también incompatibles con la vida?

A pesar del remanido argumento de los puestos de trabajo, es insultantemente obvio que el gran beneficiario de la construcción del centro de negocios –en el lugar más privilegiado actualmente disponible en Madrid– será una entidad financiera. El ayuntamiento, en vez de destinar el patrimonio público al reequilibrio territorial y a mitigar las desigualdades o satisfacer las demandas de los barrios adyacentes y del conjunto de la ciudad, se propone emplearlo en un proyecto que amplificará la distancia entre la legión de personas que sostienen la vida (abuelas que cuidan gratis a sus nietas, cuidadoras a domicilio, asistentes de hogar…) y los que se benefician de las plusvalías del suelo. Dicho de otra manera, el BBVA, visto no sólo como el banco accionista mayoritario de la operación, sino también como sujeto patriarcal de privilegios (representa a un sujeto icónico BBVA: burgués, blanco, varón y autónomo), sale ampliamente reforzado. La ciudad de la acumulación del capitalismo global se impone a la ciudad de la vida/la ciudad feminista/la ciudad de los cuidados.

Se impone un debate sobre otro posible modelo de ciudad, que supere los tópicos del distrito financiero, los rascacielos, el destino intensivo del espacio a oficinas, la ciudad exclusiva de las oficinas 'top prime', y la apuesta por otra, inclusiva, amable, habitable. Chamartín supone una oportunidad en este sentido.
La ciudad inclusiva implica un cambio de paradigma en el que se priorice el acceso a los recursos urbanos en igualdad de condiciones a todas las personas

La ciudad inclusiva implica un cambio de paradigma en el que se priorice el acceso a los recursos urbanos en igualdad de condiciones a todas las personas: que garantice el acceso a una vivienda en condiciones dignas, que haga posibles los itinerarios vitales de la gente –la emancipación o un proyecto de vida estable–. En la que el espacio público sea accesible a todas las personas independientemente de sus diferentes capacidades, con jardines, parques y servicios públicos que fomenten la corresponsabilidad social sobre el mantenimiento de las vidas; donde se fomente la autonomía de los niños y las niñas, las personas mayores y todas las que necesitan cuidados; donde la proximidad sea un valor añadido y no haya que recorrer grandes distancias para desarrollar una vida integral; donde haya una economía diversa y viva para que lo que consumimos no viaje grandes distancias y los residuos no sean un problema; donde no haya ciudadanía de primera y de segunda clase; donde se controle a los mercados inmobiliarios para que no expulsen a las personas de sus viviendas.

En esta dirección se debe avanzar. Y para quien piense que lo enunciado forma parte de una ciudad utópica, le recordamos un viejo proverbio: para salir del pozo, lo primero que se debe hacer es dejar de cavar. No deberíamos permitir que se nos imponga una ciudad financiera que torne aún más difícil la vida en nuestra ciudad.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.
Tribuna
Tribuna Las tres mil viviendas. Hoy hablamos de seguridad
Las metrópolis postfordistas, representativas del modelo securitario, se constituyen a sí mismas como dispositivos de vigilancia.
Tribuna
Tribuna Europa puede y debe promover la paz
Tanto las guerras como la militarización y escalada militar son cortinas de humo hipócrita que esconden el negocio de la industria militar, el comercio de armas y la protección de privilegios.
Dana
València Mazón se atrinchera detrás de un militar y cierra su crisis de gobierno
El president valenciano ha remodelado el Consell de la Generalitat dando salida a dos conselleras y fichando un general en la reserva para la vicepresidencia.
Opinión
Opinión Yo he venido aquí a licitar
El capitalismo de licitación, o capitalismo licitador, es el modelo económico que mejor define las prácticas que los diferentes gobiernos del PP valenciano han llevado a cabo a lo largo de la historia.
COP29
Cumbre del clima La propuesta de los países ricos para cerrar la COP29 enfurece a las naciones en desarrollo
El Norte global, causante histórico del cambio climático, propone 250.000 millones de dólares anuales para la adaptación y mitigación climática del Sur, cuando el propio borrador del acuerdo establece que al menos serían necesarios cinco billones.
Opinión
Opinión Vacío y censura en el colonialismo del interior
VV.AA.
La historia está siendo escrita con un silencio cómplice con el genocidio y mediante la censura a su condena. El silencio implica un precio terrible, pues consolida el borrado impune de la existencia, la cultura y el futuro del pueblo palestino.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Italia
Italia Milán, cuando la ciudad de las oportunidades se hace inaccesible
Ya quedan pocos talleres, farmacias, peluquerías o papelerías de barrio en Milán, y el precio de la vivienda aniquila su población originaria.
Brasil
Brasil Bolsonaro es acusado por la policía del intento de asesinato de Lula da Silva para dar un golpe de Estado
El expresidente tenía “pleno conocimiento”, según la policía brasileña, de un plan para asesinar a los elegidos por el pueblo para ser presidente y vicepresidente después de las elecciones de 2022.
Opinión
Opinión El TPI finalmente emitió las órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant. La lucha está lejos de terminar
La corte ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra cometidos en Gaza. Como resultado, ambos no podrán viajar a al menos 124 países.
Violencia machista
Convenio de Estambul GREVIO alerta de los sesgos machistas contra las mujeres en los juzgados pese a los intentos de erradicarlos
El Grupo de Expertos en la Lucha contra la Violencia contra la Mujer y la Violencia Doméstica (GREVIO) alerta del “uso persistente” del llamado Síndrome de Alienación Parental y urge a regular la figura del coordinador parental.
Alicante
maltrato animal El PP de Alicante aprueba de forma “urgente” un aumento de presupuesto para la Escuela Taurina Municipal
El gobierno de Barcala aprueba un gasto de 105.754,90€ para la escuela taurina como “proyecto educativo”. La Diputación de València, por su parte, gasta un millón para la iluminación de su coso.

Recomendadas

Argentina
Argentina El Bonaparte: la historia del hospital de salud mental que le torció el brazo a Milei
Es el centro referente en Argentina para tratamientos de salud mental y adicciones. Javier Milei intentó acabar con él, pero los profesionales sanitarios y los pacientes del hospital no lo permitieron. Esta es su historia.
Fondos buitre
Fondos buitre El Sindicato de Inquilinas demanda al fondo buitre Néstar-Azora por las cláusulas abusivas de sus contratos
Las vecinas afectadas por este fondo, en huelga de alquileres desde septiembre, están obligadas a asumir los gastos de comunidad y abonar los costes del seguro de impago e IBI a la propiedad, pese a ser estos requisitos totalmente ilegales.
Estados Unidos
Hari Kunzru “En EE UU hay dos tipos de nazis: los que llevan botas y los que llevan corbata”
El escritor británico reflexiona sobre la victoria de Donald Trump y cómo los conservadores han movilizado teorías como la psicología evolutiva para renovar sus posiciones y plantear una batalla cultural en foros online o redes sociales.
Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el CAED de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el Estado español.