We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Coronavirus
¿Es la caza una actividad esencial?
Hemos vivido un estado de alarma que ha durado meses y nos ha confinado en nuestros hogares. Entre las actividades consideradas esenciales, en un principio, estuvo la caza. ¿Qué sentido tiene privilegiar una actividad tan dañina?
El pasado mes de marzo, apenas tres días después de la declaración del estado de alarma, la Junta de Castilla y León envió una instrucción en la que aclaraba que, durante el estado de alarma, por causa de control poblacional y la protección de las explotaciones agrarias se permitía la caza mayor de forma individual y la de conejos en grupos de cuatro personas. Referirse a la caza con el eufemismo de “control de poblaciones” y justificarla como necesaria para mitigar supuestos daños a la agricultura no se sostiene por ningún lado. Agricultores y ganaderos no han tenido ningún tipo de limitación, ni horaria ni de movimiento, lo que ha permitido que, desde el principio, hayan podido ejercer su trabajo en plenas condiciones. Ni en su momento, ni a día de hoy existen informes ni datos que justifiquen la necesidad de ese “control de poblacional”; pero las administraciones pretendían que la ciudadanía hiciera un acto de fe aceptando que personas armadas pudieran salir a pegar tiros por “necesidad” mientras que el resto nos quedábamos en casa.
A esto hay que sumar que estos “controladores de poblaciones” estarían sin vigilancia, pues los agentes de la autoridad en materia cinegética (Agentes Medioambientales y Agentes de Seprona-Guardia Civil) estaban dedicados a tareas relacionadas con el estado de alarma. Entonces, ¿quién controla al “controlador”?
El segundo de los argumentos de la Junta para permitir la caza se refiere a los posibles accidentes de tráfico. En un contexto de limitación de movimientos por carretera, les parecía imprescindible hacer control de poblaciones para mitigar unos supuestos accidentes de tráfico, de nuevo sin justificar ni aportar datos. Respecto a esto, solo mencionar que quienes vivimos o trabajamos en el medio rural sabemos que en los días de caza, se producen accidentes porque “los animales están revueltos”, se altera a la fauna silvestre, que se mueve más y sale huyendo hacia cualquier lugar y es entonces cuando se pueden producir más accidentes.
Mientras la COVID-19 continuaba causando estragos y se confinaba a la población en sus casas la Junta de Castilla y León pretendía permitir la caza. Fue tan fuerte la indignación en redes sociales, con críticas venidas de todos los sectores, que la administración regional de Castilla y León tuvo que recular y anuló la instrucción..
Apenas mes y medio después, aún en cuarentena social, la testosterona y el plomo llamaban de nuevo a las puertas de la naturaleza y los cazadores volvían a reclamar su deporte, exigiendo de nuevo poder salir al campo a disparar. Volvieron a ejercer presión y esta vez a nivel estatal y en varias comunidades autónomas comenzaron a aparecer como setas instrucciones y autorizaciones para salir a cazar por “necesidad”, de nuevo, sin justificación técnica ni científica conocida. Salieron notas de prensa, escritos de petición, denuncias ante Subdelegaciones del Gobierno y Procuradores del Común, solicitudes de paralización a los gobiernos regionales, recogidas de firmas, etc y se produjo una fuerte reacción en redes sociales dirigida al ministro de Sanidad, Salvador Illa, para exigir que desautorizara la caza. Si la gente no podía salir a practicar deporte o a pasear, ni siquiera de manera individual ¿cómo era posible que un grupo de cazadores pudiera reunirse para disparar? Hubo en definitiva, una gran presión ciudadana y de varias ONGs ecologistas, lo que fue un acierto (y un éxito). Era muy difícil explicar esta permisividad con la caza, así que no tuvieron más remedio que echarse atrás y ni los gobiernos regionales ni el central fueron capaces de autorizar ningún control de poblaciones en fase cero. Pero finalmente, la caza y la pesca deportivas se colaron en el listado de actividades permitidas a partir de la siguiente fase.
La caza no es necesaria
En los medios no se suele explicar que la fauna silvestre no necesita control y, menos, mediante la caza; tiene sus propios mecanismos de regulación, tanto intra como entre especies. Además existen métodos para proteger los cultivos y el ganado, y el mejor de todos es dejar actuar a los predadores naturales (zorro, lobo) que se encargan de regular las potenciales posibles plagas dañinas que son sus presas (conejos, jabalíes, corzos,…). Dejar que los predadores, con un buen estado de sus poblaciones, hagan “su trabajo” regulando las poblaciones de presas es una gestión inteligente.
Pero sobre todo, las administraciones deberían empezar, si tanto les preocupa todo esto, por prohibir la cría, alimentación suplementaria e importación de animales cinegéticos. Seguir manteniendo las granjas cinegéticas es contradictorio y perjudicial, además de que no existe una información transparente de las mismas.
¿Es la caza un sector privilegiado por los gestores públicos? Se caza seis meses al año, a lo que hay que sumar el control de poblaciones que se hace sin restricciones temporales, las emergencias cinegéticas y todas las autorizaciones excepcionales que se dan para numerosas especies. Se fomenta mediante campañas dirigidas a menores, financiadas con dinero público, en colegios e institutos, se relajan las denuncias, no se persigue el furtivismo por parte de federaciones de caza ni de administraciones y un largo etcétera. Es solo una muestra de los privilegios que mantiene la caza, a pesar de contar con una oposición social cada vez más fuerte. Altos cargos políticos, aristócratas, políticos y empresarios, siguen cerrando acuerdos en cacerías a puerta cerrada en las grandes fincas cinegéticas o disparando sobre algún macho montés de potentes cuernas o un gran lobo alfa.
En definitiva, en estos meses de estado de alarma hemos podido comprobar el poder que tiene la caza, a pesar de estar de capa caída. Sus supuestos beneficios ni se acercan a ser tales, mientras que los daños que causan son incluso mayores de lo que pensamos.
Ecologismo
El último cartucho
Alicia Ramos nos trae unas líneas con aroma a pólvora y barrancos tinerfeños. Una reflexión muy personal sobre la caza a partir de un concepto novedoso que es casi un oxímoron (o que al menos suena muy raro): la munición ecológica.
Relacionadas
Caza
Maltrato animal A Xunta usa fondos Next Generation para financiar un campionato de caza
Caza
Maltrato animal La Xunta del PP usa fondos Next Generation para financiar un campeonato de caza
Medio ambiente
Caza en Monfragüe Recurrida la resolución que permite cazar en el Parque Nacional de Monfragüe
La caza, por mucho que me duela, sí que es necesaria. Hablando, por supuesto, en términos generales. Que en la situación en la que estemos se permitiera cazar y no que pequeños agricultores visitaran sus cultivos no se sostiene.
Pero sí, cazar se plantea como algo necesario. Llevamos cazando miles de años, hemos formado parte en esta dinámica de regularización de la que hablas, y dejar de hacerlo de golpe resulta en una desestabilización del medio. Solo hace falta mirar algunos Parques donde la caza no está permitida (véase la zona de La Pedriza o Sierra Nevada-aunque en este último sí que se hace alguna batida-) donde las poblaciones de cabra montesa y de jabalí son tales, que están devorando y eliminando cualquier posibilidad del arbolado de regenerarse (en ocasiones escaso y con dificultades). No en todos los lugares estos animales cuentan con depredadores naturales, los lobos por ejemplo no gustan de acercarse demasiado a las poblaciones humanas si pueden evitarlo, y un zorro no va a cazar a una cabra montesa.
Otra cosa es cómo está montado el negocio de la caza en este país, eso sí es algo que tiene que cambiar mucho. Las granjas cinéticas, los criaderos, los cebaderos... Muestra la hipocresía de quienes dicen actuar en favor del control de poblaciones pero son los que fomentan que haya más población para poder cazar. Es un negocio muy rentable y de señoritos y eso es algo que tiene que acabar.
Se debe cazar con criterios ecológicos y científicos, y de hecho es algo que se está poniendo en marcha muy poquito a poquito según grandes ecólogos, ingenieros forestales, biólogos (y demás ramas similares) se están involucrando en este mundo.
Por otro lado, aquí en España hasta hace unas décadas cazar no era solo cosa de señoritos con dinero con ganas de reforzar su virilidad. Vete tú a decirle a los viejos de un pueblo semiabandonado que tienen que dejar de cazar conejos para poder alimentarse. La gente ha sobrevivido, y en algunos casos sigue sobreviviendo, con lo que ha tenido mano, incluida la caza, como desde hace milenios. Es muy sencillo apoyar la prohibición de la caza desde la facilidad del supermercado y el acceso a comida. Para otra gente es su forma de subsistir.
La única especie que realmente es necesaria su extinción, es el indolente macho español y cazador
Tu medio rural debe de ser los 15 dias de verano que pasas en el pueblo
El lobby de los cotos privados está en la misma administración, y tienen pasta para tapar bocas, y poner lo económico por encima de la salud, cómo ha hecho siempre el sistema en el que vivimos.
Ni viene la peste porcina por los jabalís, ni la caza es la solución para los daños a cultivos, ni para los accidentes de tráfico. La caza es una actividad de ocio legal, pero, completamente privilegiada respecto a otras, que ahora mantiene o quiere mantener ante el resto de la sociedad una posición de "necesaria" con 4 ideas simples pero falsas.
No que va para nada es necesaria, que viene la peste porcina africana no pasa nada, que se arrasan los cultivos no pasa nada, que el 80 por ciento de los jabalíes de doñana tienen tuberculosis no pasa nada, accidentes de trafico en aumento no pasa nada. Y esto señores son urbanitas intentado dar lecciones de campo. Muestran conocimientos 0 sobre fauna. Eso si del medio millón de euros que les soltaron en plena cuarentena a los ecologistas no decís nada eee
En España se caza bastante, como que la caza no ha evitado la covid 19? O quizás la caza propaga enfermedades y plagas con granjas cinegética? Ya es hora de que salgas de la cueva, muchas friend, el odio no te deja ver...