Barbara Hammer, el cine hecho carne

El cine de Barbara Hammer no se parece en nada al cine comercial, pero tampoco al de otras directoras lesbianas como Chantal Akerman, en el que la sexualidad lesbiana apenas sabe aún cómo presentarse.
Barbara Hammer
Barbara Hammer, directora de cine y activista LGTBQ.

Toda obra comienza con una pantalla en blanco. Esto es lo que sintió Barbara Hammer la primera vez que visionó una película de Maya Deren: “Hasta entonces, aquella pantalla de la ‘historia del cine’ había estado en blanco desde el punto de vista de las mujeres. Al verla, supe con toda seguridad que haría películas”.

Hammer estuvo toda su vida rodeada del ambiente del cine. Nació en 1939 en Los Ángeles y su madre estaba obsesionada con que ella se convirtiera en la nueva Shirley Temple. “Quizá me ‘salvé’ de Hollywood gracias a la depresión y a los pequeños ingresos de mis padres”, contaría en una entrevista en 1991, porque los directores de castings la rechazaban por sus modales de familia obrera.

Sin embargo, su recorrido hasta decidirse a experimentar con la imagen no fue del todo lineal. Si bien siempre se había sentido interesada por el cine, sobre todo por aquel que se salía del circuito más comercial, se graduó por la universidad de California en psicología, a lo que más tarde siguió un máster en estudios literarios ingleses en 1963. No fue hasta principios de la década de 1970 cuando se decidió a estudiar cine.

Hammer rodó su primer corto, Squizy, en 1968, en un momento de redescubrimiento de sí misma. Así dan cuenta de ellos estos pequeños experimentos en los que, a menudo, se enfoca con la cámara, frente a un retrovisor o un espejo. Fue en aquella época de cambios cuando oyó por primera vez la palabra “lesbiana”, ya con 30 años.

Después de separarse de su marido grabó ‘Dykedactics’, un corto en el que el descubrimiento de su sexualidad redefine toda la estética por una mirada que quiere representar la vivencia del lesbianismo

Después de separarse de su marido grabó Dykedactics, un corto en el que el descubrimiento de su sexualidad redefine toda la estética por una mirada que quiere representar la vivencia del lesbianismo, rompiendo con aquella falta de imágenes sobre experiencia lésbica, y por tanto rompiendo con la invisibilidad que hasta entonces existía en el cine. En Dyketactics nuestros ojos se encuentran con el cuerpo y lo redescubren.

“Las mujeres que se estimulan y abrazan no son divisibles en una. Esta idea reforzó mi deseo de expresarme en múltiples imágenes mediante superposiciones”, comentaría Hammer sobre Dykedactics.

El cine de Hammer no se parece en nada al cine comercial, pero tampoco al de otras directoras lesbianas como Chantal Akerman, en el que la sexualidad lesbiana apenas sabe aún cómo presentarse, donde el sexo resulta casi mecánico, como si quisiera resaltar la barrera que existe entre dos personas.

En Hammer nada de esto ocurre, la belleza de las imágenes, superpuestas, que nos llegan como oleadas cálidas, introduce en su mundo de una manera hipnótica.

En Audience (1983), Hammer pregunta a la entrada y a la salida de la proyección de sus películas a varias de sus espectadoras, que comentan lo que les parece su cine, o qué esperan encontrar en él. Una de ellas dice algo especialmente esclarecedor sobre su cine: “Nunca había sentido la corporalidad del cine hasta esta noche. El único tipo de corporalidad que había sentido antes a través del cine había sido con la pornografía, la cual siempre te da la sensación de verte desde fuera”.

Lo que sorprende es cómo la mirada de Hammer muestra los cuerpos femeninos sin objetivizarlos. El resultado de esta forma de filmar produce una sensación contraria a observar tu propio cuerpo desde fuera

Hammer es capaz de mostrar la sensorialidad de las imágenes de una manera en la que casi ellas mismas llegan a tocarnos. Lo que sorprende es cómo la mirada de Hammer muestra los cuerpos femeninos sin objetivizarlos. El resultado de esta forma de filmar produce una sensación contraria a observar tu propio cuerpo desde fuera, una disociación de nuestra propia imagen a la que las mujeres tenemos que hacer frente continuamente, como bien explicó John Berger en sus Formas de ver: “Los hombres miran a las mujeres. Las mujeres se observan a sí mismas siendo observadas. Esto determina no solo la mayoría de las relaciones entre hombres y mujeres, sino también la relación de las mujeres consigo mismas. El observador de la mujer en sí misma es masculino: la mujer observada. De este modo, ella se convierte en un objeto, y más particularmente en un objeto de visión”.

Hammer cambia este hecho, colocando la cámara pegada a su propio cuerpo logra subvertir la mirada masculina, devolviendo en sus imágenes una mirada propia. Tomando conciencia de su propia imagen y de cómo es percibida, se introduce la posibilidad de devolver la mirada y de tomar partido, convirtiéndose en sujeto.

Es así como Hammer filma, por ejemplo, el sexo, casi como un encantamiento en su absoluta naturalidad. En estas escenas las imágenes transmiten la corporalidad de quien está redescubriendo su cuerpo, su sexualidad. De la misma manera en la que Annie Ernaux nos hace redescubrir la cotidianeidad mediante su escritura, o su cine, como en los años Super 8, Hammer nos permite acceder a un reconocimiento de nuestro propio cuerpo mediante las imágenes que ofrece.

Porque el cine de Hammer es un cine que nace del cuerpo y que se comunica con el cuerpo. Utilizaba la cámara con efectos kinéstesicos, de manera que amplifica la sensaciones corporales, como se puede observar en Pond and Waterfall. En este corto, rodado en 1982, Hammer sumerge la cámara en el agua, pasando del ritmo lento y suave de la superficie en un estanque al movimiento frenético del agua cayendo en una cascada hasta desembocar en el mar. “Haciendo que nade la cámara consigo que el público nade, de modo que no solo apreciarán la naturaleza prístina y única de un ecosistema, sino que también reconocerán su implicación personal y psicológica”, explicó la propia directora en una entrevista publicada por Art Papers en 1991.

De esta manera, el cuerpo de los espectadores ya no se comporta pasivamente, sino que las imágenes requieren de ellos una participación activa, una asimilación de ese ritmo del agua a su propio ritmo, al fluir de su propia sangre y respiración.

Durante toda su carrera, Hammer siguió experimentando con distintas texturas y formatos para acercarnos a la materia pero también a los procesos naturales, jugando con el espacio y con el tiempo, como ocurre en Stones, en la que nos hace partícipes de un intento por moldear el tiempo y que recuerda a Ritual in Transfigured Time de Maya Deren.

En los años 90 seguiría reivindicando los derechos LGTB y comenzaría a centrarse en los largometrajes, como Nitrate Kisses (1992), que construyó con imágenes de archivo —una técnica que repetirá en otras películas como History Lessons y The Female Closet, donde reconstruye una historia lésbica mediante imágenes de archivo— y entrevistas a parejas homosexuales. Así, Hammer intentaba introducirse en las grietas, en esas imágenes negadas por la historiografía canónica y proponer una genealogía. Por eso quizá ella misma afirmó que eligió “el cine y el vídeo como medio para hacer visible lo invisible. Cualquiera puede quedar fuera de la historia. Me veo obligada a revelar y celebrar a los pueblos marginados cuyas historias no han sido contadas”.

Durante la primera década de los 2000 siguió produciendo largos como My Babushka (2001), una investigación sobre su ascendencia ucraniana, y Resisting Paradise (2003). Pese a que le diagnosticaron un cáncer de ovario en 2006, durante el tiempo que convivió con la enfermedad sacó siete películas más, una de ellas dedicada precisamente a su vida con la amenaza del cáncer, Horse is not a Metaphor (2008), en la que habla con total honestidad de la enfermedad pero también de esas nuevas visiones que otorga el presente continuo al que se circunscribe la persona que está enferma.

También realizó numerosos documentales, como Maya Deren’s Sink (2011), tributo a Maya Deren en la que proyecta las propias películas de Deren en la casa en que fueron grabadas, y Welcome to this house (2015), en el que habla de Elizabeth Bishop mientras recorre las casas que habitó la poeta junto a sus parejas.

Antes de morir en 2019, a consecuencia del cáncer que padecía, nos legó una nueva forma de entender la imagen, expandió nuestra forma de percibir y de percibirnos. Como ella misma dijo: “Mis películas suelen calificarse de visionarias, pero yo no lo soy. Vivo mi vida de lesbiana. No estoy esperando. Mi vida es mi visión. Al documentar lo que otros llamarían visionario, lo que yo llamaría ‘de acción’, espero despertar la imaginación del público”.

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

Málaga
Málaga, el punto de inversión para los fondos israelíes a pie de playa
Diversos fondos de origen israelí están presentes en proyectos urbanísticos de Málaga influyendo en la turistificación de la provincia mientras se enriquecen con la ocupación de Palestina
Región de Murcia
Belinda Ntutumu
“La violencia racista no parará mientras Vox pueda presentarse a elecciones”
La cofundadora de Afromurcia señala a los discursos de Vox como causantes de la violencia racista de Torre Pacheco y califica de “laxa” la respuesta institucional: “Deberían haber impedido que los disturbios continuaran durante tres días”.
Palestina
La coordinadora europea contra el antisemitismo dice que los informes sobre la hambruna en Gaza “son rumores”
Katharina von Schnurbein es la encargada de proteger a Israel en las discusiones que esta semana tienen lugar sobre el acuerdo preferencial que la UE tiene con el Estado sionista.
Palestina
Más de mil caras conocidas de la cultura exigen al Gobierno que cese la venta de armas a Israel
Una carta dirigida al presidente del Gobierno por más de mil profesionales de la cultura considera que “mantener los negocios armamentísticos con Israel es complicidad activa con el genocidio”.
El Salto n.79
La celulosa o la vida: periodismo situado y lucha social para frenar un ecocidio
El jueves 17 de julio os esperamos en el CS “A Nubeira” de Vigo para presentar el último número de la revista El Salto.
Castellón
El BDS Castelló pide al FIB que facilite la devolución de entradas por su vinculación con KKR
El BDS y la Plataforma Castelló per Palestina piden al festival que se desvincule del fondo y que adopte un compromiso público para incluir el respeto por los derechos humanos palestinos en sus protocolos éticos.
Opinión
Torre Pacheco: el síntoma de un sistema agroexportador podrido
Se podría hacer un mapa de la llamada conflictividad social migrante y coincidiría, casi matemáticamente, con el de los polos agroexportadores.
Comunidad El Salto
El Salto estrena nueva página: una web como una casa
Después de un año de trabajo, lanzamos en julio la nueva web de El Salto, con un nuevo diseño, pero, sobre todo, con una nueva Zona Socias llena de ventajas para las personas que hacen posible El Salto con su apoyo.
Violencia machista
El 30% de los feminicidios íntimos se producen en verano pero no es el calor, es el patriarcado
El Ministerio de Igualdad convocó la semana pasada un comité de crisis tras los nueve asesinatos de mujeres por sus parejas o exparejas en junio. ¿Qué pistas da este dato sobre cómo orientar las políticas públicas?

Últimas

Opinión
Cuando una huertana llora: saquen sus racistas manos de nuestra región
Me aterra pensar que lo que ha sucedido en Torre Pacheco es el comienzo de algo peor, que es el primer síntoma de una enfermedad que hemos permitido que campe a sus anchas por nuestras regiones.
Análisis
La crisis por el ‘caso Cerdán’ empuja al PP y Vox por encima de los 200 escaños
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) señala una caída del PSOE, que apenas aprovechan los partidos a su izquierda, y un aumento de votos en la mayoría de PP y Vox
Cómic
Gotham como estado mental
Que Batman es el personaje del cómic de superhéroes más icónico del último medio siglo es algo a lo que también contribuye una iconografía del mal como forma urbana a la que responde la ciudad de Gotham, un estado mental en sí mismo.
Opinión
Día Internacional de las Personas No Binarias: no pedimos nuevos derechos, exigimos los que tenemos
Varios tratados internacionales permiten una interpretación favorable a reconocer a las personas no binarias. El Estado español incumple su deber de protección de estas personas.
Estados Unidos
Donald Trump amenaza a la Unión Europea con aranceles del 30% a sus productos a partir de agosto
Ursula von der Leyen ha respondido al anuncio de Trump insistiendo en la vía del diálogo pero anunciando que “tomarán todas las medidas necesarias para salvaguardar" sus intereses
Más noticias
Murcia
Colectivos antirracistas denuncian la impunidad de la ultraderecha en Torre Pacheco, donde sigue la violencia
En la localidad murciana se ha producido una segunda jornada de violencia racista, ultraderechistas de otros territorios se han unido a las “patrullas” para “limpiar España”.
Economía social y solidaria
¿Dónde está la juventud en la Economía Social y Solidaria? Un relevo que se teje entre retos y oportunidades
Cada vez más jóvenes se acercan buscando formas de vida y empleos coherentes con sus valores. Sin embargo, su participación sigue enfrentando barreras: precariedad, estructuras poco flexibles y falta de relevo real.
Río Arriba
Javier Guzmán: “Desde la izquierda falta la visión de que el derecho a la alimentación es un tema básico”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast donde hablamos de soberanía alimentaria, políticas públicas relacionadas con la alimentación, tratados de libre comercio y sus efectos sobre la agricultura, ganadería y alimentación.

Recomendadas

Feminismos
Patricia Reguero
“Mis relatos están escritos al lado de otras, arropada por la escucha de otras”
Patricia Reguero Ríos, redactora de El Salto, presenta ‘Todo lo que pasó el día que me mordió mi hija’ (La Imprenta, 2025), un conjunto de relatos que desde lo individual apelan a lo colectivo y que se devoran con una mezcla entre ansiedad y placer.
LGTBIAQ+
Mana Muscarsel
“La amistad da más juego para salir de la lógica de la familia porque tiene menos reglas"
La autora y psicóloga argentina pone en valor la amistad frente a los modelos relacionales centrados en la pareja y la familia. Tampoco le interesa la familia elegida: “Marca una línea muy clara entre lo que pertenece y lo que no”.
Barcelona
El reciclaje invisible: la relación entre la chatarra y la ciudad de Barcelona
La red de reciclaje en Barcelona es de una complejidad casi hermética, más aún si hablamos de los recicladores informales, más conocidos como chatarreros. Salimos a la calle a entender una economía sumergida que está a la vista de todos.
Medios de comunicación
El futuro del periodismo no lo está escribiendo una máquina
El periodista Pablo Mancini, estratega dentro de The Washington Post, defiende una profesión aquejada de múltiples problemas. El primero, y más crucial, la deserción de miles de personas que ya no quieren estar informadas.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...