Privatizaciones
La Universidad de Alcalá deja las instalaciones deportivas en manos de una empresa en quiebra

Vulneración de derechos, nóminas sin cobrar y una empresa desaparecida: así viven los trabajadores de las instalaciones deportivas de la Universidad de Alcalá.
Alcala de Henares instalación deportiva
Instalaciónes deportivas en la Universidad de Alcala de Henares.
@Guille8Martinez
30 jun 2023 05:00

Ilitia Mediterránea S. L., retrasos de meses en los pagos a sus trabajadores de las instalaciones deportivas de la Universidad de Alcalá (UAH) y una sentencia condenatoria por vulneración de derechos fundamentales tras haber despedido a la delegada del personal por parte de Comisiones Obreras (CCOO). Esos tres elementos componen el mejunje en el que se encuentran en torno a cuatro decenas de empleados que esperan con ahínco un dinero que parece que nunca llega. Lo peor: la empresa no da señales de vida, parece que ha desaparecido.

Begoña García es una de las protagonistas de esta historia. Desde el 4 de enero de este 2023, relata, Ilitia Mediterránea se hizo con la gestión de las instalaciones deportivas de la universidad alcalaína. “Lo pusieron todo patas arriba nada más llegar. Digamos que, rápidamente, nos dimos cuenta de que no venían con muy buenas intenciones”, en sus propios términos. A pesar de que la plantilla había sido subrogada al completo y que sus derechos adquiridos no podrían desaparecer, la compañía no lo respetó.

El primer mes ya les tardaron en pagar. “Poco después me dijeron que las nóminas se ingresarían entre el día 10 o 15, a lo que nos opusimos. Nosotros veníamos cobrando el 31 de cada mes y le ofrecí cobrar el día 5 del mes siguiente como máximo”, explica García. Cuando recibieron el primer pago, comenzaron las irregularidades: “Un compañero y yo estábamos justo de baja y nos lo ingresaron de una forma muy rara, nos lo pagaron como unos tres euros al día, así que todavía nos deben dinero de aquello”, en palabras la delegada sindical.

“Me echaron porque les estábamos rompiendo los planes que tenían para nosotros. Nuestras condiciones son bastante buenas para el sector que es y eso no les cuadró”

No fue lo único que no encajaba, pues la mayor parte de los trabajadores vieron en sus nóminas cómo el grupo profesional al que pertenecían había cambiado, degradándose. “Y también vimos que una mejora voluntaria que habíamos adquirido con las anteriores empresas se convirtió en un plus de productividad. ¿Cómo se mide la productividad aquí, si somos técnicos deportivos? Además, que si la UAH les dice que debe haber una clase con cinco alumnos, ellos deben darla, porque en teoría solo se dedican a cobrar por un lado y pagar por el otro”, se explaya la propia García.

Despedida tras denunciar a la empresa

Organizada, la plantilla decidió interponer una demanda colectiva por modificación sustancial de condiciones laborales a través de su representación legal, es decir, García. La denuncia se materializó el 29 de febrero y el 15 de marzo. Tanto ella como otro compañero fueron despedidos por Ilitia Mediterránea. La empresa aducía falta de confianza, pero García piensa que fue por otro motivo: “Me echaron porque les estábamos rompiendo los planes que tenían para nosotros. Nuestras condiciones son bastante buenas para el sector que es y eso no les cuadró, pero ellos firmaron un pliego en el que sabían de primeras las condiciones que había”.

La situación empeoraba muy rápido, por lo que los afectados decidieron ir a la huelga. Hasta el día de hoy, han realizado tres jornadas de paros de dos días cada una. “El primer día nos manifestábamos por la tarde en las propias instalaciones deportivas para que los usuarios del servicio público vieran las condiciones en las que se encontraban los trabajadores y trabajadoras, y al día siguiente por la mañana frente al rectorado de la UAH, porque en última instancia es la entidad responsable”, relata Hugo Carrasco, secretario de Acción Sindical y Juventud de CCOO Henares.

“Hemos ganado el despido nulo, así que le tienen que abonar los salarios de tramitación y una indemnización por vulneración de derechos fundamentales de más de 7.500 euros”

Tras una primera reunión con la compañía a finales de marzo, coincidiendo con la primera jornada de protestas, Ilitia Mediterránea no ha vuelto a dar señales de vida. Según la delegada sindical, tampoco responden a los requerimientos por parte de la propia Universidad, ni a Contratación. Lo mismo sucede con sus propios trabajadores en las instalaciones deportivas que reclaman el cobro de sus nóminas. Ni siquiera saben con quién tienen que hablar a la hora de comunicar una baja laboral.

La justicia avala a la trabajadora

Ahora, la justicia ha dado la razón a García. “Hemos ganado el despido nulo, así que le tienen que abonar los salarios de tramitación [los salarios que no ha percibido la trabajadora desde su despido hasta la fecha de su nueva incorporación] y una indemnización por vulneración de derechos fundamentales de más de 7.500 euros”, relata Carrasco. Él mismo confirma que la compañía no se ha presentado a las mediaciones obligatorias entre plantilla y empresa antes de la convocatoria de huelga, y lo mismo ocurrió en el juicio a García. 

“Es muy preocupante que una empresa que en 2021 estaba en quiebra técnica con unas pérdidas acumuladas de 100.000 euros, acabe siendo la responsable de un servicio que debería ser público”

“Yo tengo la sentencia ahí, imagino que alguien la tendrá que cumplir y que será a partir de septiembre porque pronto terminarán las actividades deportivas y ya me incorporaré con la siguiente empresa a la que se adjudique el servicio”, vaticina la afectada. Es ella quien sostiene que la UAH, por su parte, ya está en trámites de resolver el contrato con Ilitia Mediterránea. “Estamos deseando que nos digan que ya se han desvinculado de ella y que también la Universidad se hace cargo de los sueldos pendientes, que es lo que deberían hacer como empresa subsidiaria que son”, incide la sindicalista.

Empresas sin solvencia gestionando servicios públicos

Carrasco, en este sentido, apunta que “es muy preocupante que una empresa que en 2021 estaba en quiebra técnica con unas pérdidas acumuladas de 100.000 euros y un fondo de maniobra negativo de 70.000 euros de deuda a corto plazo y que tras una ampliación de capital en teoría sanee sus cuentas acabe siendo la responsable de un servicio que debería ser público”. A pesar de los intentos por contactar con Ilitia Mediterránea desde este medio, el número de contacto que aparece en su documentación legal no existe en la actualidad.

“Hasta donde sabemos, en Mejorada del Campo se le adjudicó la gestión de la piscina municipal y allí los trabajadores han estado hasta tres meses sin cobrar, y similar ha ocurrido con compañeros de Mataró, también con problemas similares de pago con esta empresa”, se explaya el secretario de Acción Sindical y Juventud.

En realidad, Ilitia Mediterránea está presente en diferentes municipios españoles. Es el caso de Calp o La Vila, en la Comunitat Valenciana; Los Llanos, en Albacete, donde se encarga de las actividades lúdicas y culturales en la base que allí tiene el Ejército del Aire; pero también la madrileña Universidad Rey Juan Carlos.

Según el mismo Carrasco, empresas sin solvencia ni capacidad económica no deberían gestionar un servicio de estas características. “Entendemos que el servicio deportivo de la UAH debería ser público y no gestionado por una empresa privada, pero dado el marco legal en el que eso se permite seguiremos luchando por el respeto y mejora de las condiciones de la clase obrera”, en sus propios términos.

La precariedad, un arma para la explotación laboral

Asimismo, el sector precario en el que se deben desenvolver estos profesionales también juega un papel determinante. “Observamos una parcialidad enorme. Hay gente que trabaja seis horas a la semana y dependen de tener diferentes contratos en distintos lugares para llegar a fin de mes”, añade el sindicalista. De hecho, el convenio del sector bloqueado por la patronal desde 2018 marcaba unos salarios tan bajos en las categorías profesionales que una gran parte de ellas aumentó con el incremento del SMI.

“Hemos detectado un incremento de la represión sindical desde finales de 2022. Hemos visto a cinco delegados o afiliados despedidos y siempre el mismo proceso de intentar fabricar un despido disciplinario"

“Es un elemento de presión que utilizan las empresas porque saben que si un trabajador cobra 400 euros y no le abonas un par de meses, ese trabajador seguramente no lo denuncie porque no le salga a cuenta iniciar un proceso judicial”, explica Carrasco, quien no se olvida de la dinámica que desde CCOO están observando en el Corredor del Henares, la zona este de la región madrileña: “Hemos detectado un incremento de la represión sindical desde finales de 2022. Desde entonces, hemos visto a cinco delegados o afiliados despedidos y siempre el mismo proceso de intentar fabricar un despido disciplinario para quitarse de encima a los trabajadores combativos”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Palestina
Palestina Salamanca y La Rioja se suman a las más de 300 acampadas universitarias contra el genocidio
Estudiantes de ambos centros universitarios instalarán hoy las tiendas, cerca de sus respectivas bibliotecas, impulsados por la chispa que ha prendido alrededor del mundo y coincidiendo con el 76 aniversario de la Nakba.
Palestina
Acampadas Universitarias Palestina Estudiantes de Sevilla acampan contra el genocidio en Palestina a pesar de la represión denunciada
Las estudiantes de la US y la UPO han empezado durante la jornada del lunes dos acampadas en apoyo al pueblo palestino a pesar la represión de las instituciones educativas denunciada por las asambleas estudiantiles
Palestina
Palestina Salamanca y La Rioja se suman a las más de 300 acampadas universitarias contra el genocidio
Estudiantes de ambos centros universitarios instalarán hoy las tiendas, cerca de sus respectivas bibliotecas, impulsados por la chispa que ha prendido alrededor del mundo y coincidiendo con el 76 aniversario de la Nakba.
Videovigilancia
Derechos y libertades Videovigilancia algorítmica en nombre de la seguridad de los Juegos Olímpicos de París
Aunque las autoridades francesas aseguran que no se utilizará el reconocimiento facial durante los Juegos Olímpicos de París, existe el temor de que el uso de la videovigilancia algorítmica se convierta en permanente.
Palestina
Palestina Françoise Vergès: “La liberación de Palestina sería una verdadera sacudida para el mundo”
La politóloga antirracista Françoise Vergès radiografía el momento de quiebre en el que se encuentra el relato del excepcionalismo occidental que abandera Israel, y analiza los movimientos que le plantan cara desde las acampadas o el Sur global.
Industria armamentística
Industria armamentística La Junta de Andalucía reúne en Sevilla a 250 empresas armamentísticas cómplices con el genocidio en Palestina
La Junta de Andalucía organiza la Aerospace and Defense Meetings ADM 2024 en Sevilla que congregará a cientos de empresas armamentísticas en pleno genocidio de Israel contra el pueblo palestino y en un contexto de rearme en la UE
Análisis
Análisis Israel nunca tuvo derecho a existir
Sobre Israel hay quienes se sobresaltan al escuchar que no tiene derecho a existir. Inmediatamente le atenazan décadas de falsos axiomas y propaganda de occidente para sostener su colonia en Palestina.
Agroecología
Día de la Persona Agricultora Milikua: “Las tareas del campo cobran valor cuando las hacen los hombres"
La autora del libro 'Sobre la tierra, bajo la sombra' (Consonni, 2023) reflexiona en el Día de la Persona Agricultora sobre el papel que ha tenido y tiene la mujer en el campo, su representación en los espacios de poder o sobre el Estatuto Vasco de las Mujeres Agricultoras
Sanidad pública
Sanidad a la madrileña Vecinas de Madrid escenifican la tragedia de la sanidad pública en una acción sorpresa en el Metro
El próximo domingo 19 de mayo a las 12:00 horas cuatro columnas desde Nuevos Ministerio, Plaza España, Hospital de La Princesa y Atocha partirán hacia Cibeles en la que se espera otra masiva marcha en defensa de la sanidad pública.

Últimas

Opinión
Opinión Infiltrados en la democracia
Un nuevo caso de infiltración policial subraya la permanencia de una serie de prácticas que amenazan derechos fundamentales y tienen potencial delictivo.
Catalunya
Catalunya El Senado veta la Amnistía y la Audiencia Nacional intenta que los imputados de Tsunami abandonen el exilio
El juez de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, les ha llamado a declarar desde Barcelona el 22 de mayo, antes de que se apruebe la ley. Les imputa terrorismo, un delito por el que no podrían ser amnistiados.
Genocidio
Human Rights Watch Israel ha lanzado al menos ocho ataques sin aviso previo contra organizaciones humanitarias
La organización no gubernamental Human Rights Watch acusa a Israel de atacar centros y convoys de ayuda humanitaria y advierte a los países que suministran armas a las FDI que eso contraviene el derecho internacional.
Palestina
Movimiento BDS Archivada la denuncia por una acción de boicot a McDonald's
Un juzgado de Madrid considera que en el despliegue de la pancarta “Ahora sí, boicot McDonald's. Llámame McGenocidio” no existió delito.
Más noticias
Sidecar
Sidecar Un régimen de guerra global
Los conflictos armados están atrayendo a algunos de los actores más poderosos de la escena internacional, lo cual invoca el espectro de la escalada nuclear.
Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda El Gobierno amplía la moratoria hipotecaria unas horas antes de su vencimiento
Cuando faltaban unas horas para el fin de la moratoria hipotecaria que beneficia a 30.000 familias, el Consejo de Ministros aprueba su prórroga hasta 2028. La PAH anuncia que seguirá luchando por una “solución definitiva”.
Sidecar
Sidecar Problema Trump
Los críticos siempre han tratado a Trump como un desgracia que hay que deplorar, más que como un problema que hay que resolver.
Crisis climática
Industria y crisis climática La transición de la industria del acero choca con los límites del hidrógeno verde
La industria siderúrgica debe reducir en un 93% sus emisiones para que el aumento de la temperatura global se mantenga un 1,5º C por debajo de los niveles preindustriales. Y el hidrógeno verde no es suficiente para transformar la industria del acero.

Recomendadas

Genocidio
Movilizaciones Estudiantes por Palestina, el “no en nuestro nombre” global
Las acampadas se extienden por todo el mundo. La represión de algunas de ellas no consiguen limitar el alcance de una forma de protesta que desafía a los Estados y que Israel considera una amenaza que pone en riesgo su impunidad.
Ocupación israelí
Guerra contra Gaza Crece el debate en EE UU por su responsabilidad en la masacre de Gaza
Un informe del Departamento de Estado admite por primera vez que las bombas de 900 kg suministradas por EE UU se han podido utilizar de forma indiscriminada contra civiles.
Salud
Salud perinatal Susana Carmona: “No encuentro nada más feminista que estudiar lo que pasa en nuestros cuerpos”
La psicóloga clínica Susana Carmona recoge en ‘Neuromaternal’ casi todo lo que la neurociencia puede enseñar sobre las madres. Por ejemplo que la maternidad, como la adolescencia, es una época de neuroplasticidad y de adaptación.
Palestina
Noura Erakat “Nuestra lucha por salvarnos como palestinos es también una lucha para salvar el mundo”
La organizadora y abogada defensora de la Campaña en Estados Unidos por el fin de la ocupación israelí Noura Erakat respondió a las preguntas de Olga Rodríguez para la entrevista de la revista trimestral de primavera de El Salto.