Nicaragua
Nicaragua: Juventud bajo represión, cárcel y exilio

Decenas de jóvenes nicaragüenses se han enfrentado en los últimos años con un contexto repleto de violencia. Tras la consolidación del régimen por un periodo presidencial de cinco años con el simulacro de una elección general el pasado siete de noviembre, las generaciones que salieron a las calles en abril de 2018 se preguntan qué va a pasar ahora.
Repor jovenes Centroamerica - 3
Estudiantes de la Universidad Centroamericana (UCA) protestan contra la violencia machista el 8 de marzo. Foto: Antonio
16 dic 2021 08:00

La “Negra” sabía de antemano que las pasadas elecciones del siete de noviembre serían “una farsa” en Nicaragua, pero incluso así le invadió una enorme decepción: nunca ha votado en su vida, y ahora no sabe cuándo lo podrá hacer. Tenía siete años cuando Daniel Ortega llegó al poder, y ahora intenta vivir en una dictadura que no sabe cuándo caerá.

“Andamos en modo avión”, dice con una voz jovial y haciendo referencia a la opción que tienen los teléfonos inteligentes de desconectarse de todas las redes. Accedió a hablar con la única condición de no revelar su identidad, porque en Nicaragua, hablar con los medios, pero sobre todo hablar de forma crítica sobre el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, puede traer graves consecuencias. 

Varios jóvenes ya lo han pagado desde el estallido social de 2018, y más recientemente por participar en espacios políticos y de la sociedad civil. Ortega y Murillo mantienen en prisión a 140 presos políticos, entre ellos estudiantes y líderes estudiantiles como Lesther Alemán y Max Jerez, miembros de la Unión Universitaria Nicaragüense (AUN).

Guatemala
Especial: “La rebelión de la juventud en Centroamérica” Guatemala: la revuelta de las niñas en bicicleta sostiene la protesta social
Las detenciones arbitrarias durante una protesta en noviembre de 2020 desmovilizaron a la sociedad civil guatemalteca. Desde entonces, son los movimientos de mujeres y niñas los que se han alzado como la principal oposición a las injusticias que asedian este país.

“La Negra”, como pidió que la llamáramos, está en Nicaragua y en espacios de incidencia que podrían ser considerados como peligrosos para cualquier joven de su edad. Pertenece a una nueva generación de activistas feministas que han protagonizado protestas en el recinto de la Universidad Centroamericana (UCA) y utilizan las redes sociales como una de sus principales “trincheras” contra el régimen. Muchas de ellas estuvieron encarceladas, fueron al exilio, regresaron y ahora desde la clandestinidad sostienen una lucha silenciosa. 

“Nosotros teníamos mucha fe en estas elecciones, nosotros creíamos que el cambio iba a ser a través de ese proceso. En la víspera, sentimos una decepción tremenda… En verdad te digo: no sabemos qué hacer, ni qué pasará”, analiza vía llamada telefónica, resguardada y cambiando de casa de seguridad cada cierto tiempo. Más en días como estos, en los que nadie sabe qué puede pasar en una Nicaragua sometida al estado policial y la persecución.

De esta forma han vivido miles de jóvenes desde el inicio de las protestas antigubernamentales. La clandestinidad en el país gobernado por Ortega y Murillo implica cambiarse de casa cada cierto tiempo y no dejar rastro. Hacer siempre un “doble chequeo” de puertas y ventanas. Fijarse muy bien en el entorno donde uno vive, con el fin de reconocer algún movimiento que pueda salirse de lo común. En los casos más extremos, implica meter la cabeza bajo tierra como una avestruz, es decir: vivir enclaustrado, no salir. Los vigilantes del régimen están en todas partes y operan mediante una detallada red de soplones en cada barrio del país. 

Las elecciones del siete de noviembre representaron la consolidación del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), la heróica guerrilla que venció a la dinastía de los Somoza.  Hoy, el FSLN encabezado por Ortega y Murillo es considerado como una dictadura

Nicaragua mira hacia el abismo

La incertidumbre es inmensa. Las elecciones del siete de noviembre representaron la consolidación del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), la heróica guerrilla que venció a la dinastía de los Somoza, y que por décadas fue parte del mito revolucionario que jóvenes como “La Negra” han escuchado en boca de sus padres y madres toda su vida. 

Hoy, el FSLN encabezado por Ortega y Murillo es considerado como una dictadura. Si antes había dudas en ciertos sectores de la comunidad internacional, todas estas se disiparon el domingo, cuando la pareja presidencial selló su permanencia tras haber encarcelado a más de cuarenta personas, entre ellas siete aspirantes opositores, políticos, activistas, empresarios, campesinos, y a cualquiera que ellos consideran un tropiezo. Las elecciones sólo han sido reconocidas por un puñado de países y viejos aliados ideológicos como Rusia, Cuba y Venezuela.

Éxodo de jóvenes

Así, la pareja presidencial conduce al país a una crisis de múltiples e insondables aristas. La primera, y la más visible está relacionada con el éxodo masivo de nicaragüenses a Estados Unidos. Muchos de ellos son jóvenes que, al verse imposibilitados de visualizar un futuro claro, deciden largarse de su país y buscar vida en otro. “La Negra” conoce a varios exiliados que no han vuelto desde abril de 2018, y otros que se han ido en los últimos meses. La permanencia de Ortega y Murillo representa serios problemas para la débil economía del país, que cumplirá en 2022 cuatro años en recesión. Por ejemplo, en 2020 el Producto Interno Bruto del país se contrajo un 9%, según datos del Banco Mundial. Además, Nicaragua se encamina a un aislamiento internacional sin precedentes después de que ni la Unión Europea, ni Estados Unidos, ni países como Canadá o Costa Rica hayan reconocido el resultado de los comicios.

En medio de este panorama, en el país todavía quedan los miembros de AUN, cuyos líderes fueron apresados por el régimen en la escalada represiva ejecutada a partir de junio de 2021. AUN puede considerarse uno de los pocos movimientos juveniles que tiene permanencia en Nicaragua. Algunos de ellos viven en asedio y otros han sido amenazados. También siguen trabajando desde la clandestinidad. “Nuestra prioridad absoluta en este momento es la liberación de los presos políticos”, dice Dolly Mora, vicepresidenta de la organización.

AUN puede considerarse uno de los pocos movimientos juveniles que tiene permanencia en Nicaragua. Algunos de ellos viven en asedio y otros han sido amenazados. También siguen trabajando desde la clandestinidad

A inicios de año, el movimiento pujaba por ir a unas elecciones con el fin de salir de la crisis sociopolítica que el país arrastra desde las protestas de 2018. Las campañas de AUN fueron criticadas debido a que algunos sectores señalaban que no habían condiciones para convocar a unos comicios. No obstante, sus integrantes formaron parte de la unión entre la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia y el partido Ciudadanos por la Libertad (CXL), el primero un movimiento multigremial y el segundo una agrupación de derecha. A pesar de la creación de este bloque opositor, el régimen despojó de su personería jurídica a la agrupación política tras una impugnación que hizo el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), antiguo aliado de Ortega. 

Los jóvenes de AUN se quedaron sin plataforma electoral y sin candidatos opositores a quienes apoyar. Después, los líderes Alemán y Jerez —dos rostros conocidos en Nicaragua por su aparición en los medios y su participación en las mesas de diálogo con Ortega— fueron encarcelados en un violento operativo policial. 

“A pesar de que Ortega nos arrebató el siete de noviembre esa oportunidad, no nos arrebató el compromiso que hemos tenido como organización y que tenemos cada una de las personas que la integra”, sostiene Mora. 

Centroamérica
Especial: "La rebelión de la juventud en Centroamérica" Mujeres jóvenes centroamericanas: Unidas en la lucha contra las violencias machistas
Movimientos de jóvenes feministas centromericanas luchan contra los femicidios, el abuso sexual y la criminalización del aborto, mientras plantan cara a la deriva autoritaria que se extiende en la región.

Los desafíos la juventud nicaragüense 

Los jóvenes en Nicaragua han pagado la disidencia con represión. El estallido social de 2018 fue la muestra, para algunos analistas, de que la juventud no era del todo apática y que más bien participaban cuando sentían que había una injusticia. 

Para Juan Diego Barberena, un joven abogado de 25 años que forma parte de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), las protestas antigubernamentales de 2018 abrieron una serie de opciones de participación política para la juventud. Desde trincheras en recintos estatales, hasta la creación de mesas de diálogo. 

“La mayoría de la gente y los jóvenes, sobre todo en la marginalidad social, salieron a la calle precisamente porque sabían que Daniel Ortega era un autoritario. También hay un sistema oprobioso que los excluye, que los margina y que no les deja más alternativa que rebelarse ante el sistema”, recalca el opositor. 

Tras las protestas estudiantiles, llegó la represión letal. Algunos de ellos, como Álvaro Conrado –de solo 15 años–, o Richard Pavón fueron asesinados en la calle. Otros, encarcelados por levantarse en sus recintos universitarios, y muchísimos condenados al exilio. En el país, la crítica ha sido acallada brutalmente, y quienes todavía permanecen en Nicaragua lo hacen desde una sepulcral clandestinidad para evitar represalias.

En el país, la crítica ha sido acallada brutalmente, y quienes todavía permanecen en Nicaragua lo hacen desde una sepulcral clandestinidad para evitar represalias

“Abril significó un empoderamiento de las juventudes sobre los temas trascendentales del país que atañen directamente a las y los jóvenes, porque al final somos, en teoría, quienes vamos a dirigir este país tarde o temprano. Antes era inconcebible en Nicaragua que hubiesen jóvenes de 25 años, por ejemplo, discutiendo temas de vital trascendencia”, agregó el joven jurista. 

Barberena cree que los siguientes años representan un reto para la sociedad nicaragüense, pero sobre todo para los jóvenes. “Debemos estar claros de que nos toca un largo trecho más por seguir luchando, y eso para los jóvenes representa tomar decisiones acerca del futuro”, dijo. 

La socióloga Elvira Cuadra ha analizado en diferentes momentos la participación de los jóvenes en la política del país. Para ella, existe una disputa entre “las viejas prácticas de la política tradicional” y las nuevas formas de participación juvenil. 

“Las renovaciones no son tan visibles por las mismas dinámicas de la represión, pero se están renovando constantemente, porque cuando encuentran obstáculos para seguir desarrollando cierto tipo de actividad, ellos las cambian y buscan nuevas formas. Es innumerable, es realmente variado”, analizó la experta. 

A pesar de ello, los golpes del régimen han sido tan brutales que se avizoran nuevos éxodos masivos. Según una encuesta realizada por CID Gallup, seis de cada 10 jóvenes tienen la intención de migrar, y si tuvieran la oportunidad lo harían. 

En medio de todo, muchos como Dolly Mora y sus colegas de AUN creen que cualquier salida pasará por la vía electoral. El problema estriba en los tiempos. “Sabemos que probablemente pasen un par de años más. Probablemente, el 2026 pueda ser la gran oportunidad de oro, o al menos es lo que esperamos y podemos proyectar”, dice Mora con el practicismo que define a su movimiento juvenil. Sin embargo, cuando el cambio que tanto anhelan llegue, serán cinco años menos jóvenes, si las proyecciones resultan ciertas. 

Este reportaje es parte del especial periodístico “La rebelión de la juventud en Centroamérica”, desarrollado por medios que son parte de la alianza Otras Miradas. Otras Miradas es una alianza de medios de México y Centroamérica que busca poner en agenda los temas que afectan a las grandes mayorías en los países de esta subregión del continente americano, a través de la mirada de medios y periodistas independientes. Para este trabajo han contado con financiación de la Fundación Friedrich Ebert. Los medios participantes de este especial son: La Lupa, Divergentes y No-Ficción.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

O Teleclube
O teleclube A desaparición de Paula é a protagonista do décimo terceiro episodio de 'O Teleclube'
Sonia Méndez estréase nas longametraxes de ficción con 'As Neves' un filme no que seguimos a un grupo de adolescentes e o por que dunha perda.
Periodismo
El periodismo del futuro Conectar con la juventud y recuperar credibilidad, principales desafíos del periodismo del futuro
El Salto reúne a futuros profesionales y periodistas de medios escritos y audiovisuales en una jornada de trabajo y reflexión en la que se trataba de hablar de medios, de periodismo y de comunicación.
Desempleo juvenil
Desempleo juvenil Extremadura lidera el desempleo juvenil en España
La tasa de desempleo juvenil ha aumentado trece puntos hasta alcanzar un 44,91% de paro. Más de 20.000 jóvenes han migrado en los últimos años.
Congreso de los Diputados
Congreso de los Diputados Los socios avisan que la paciencia se acaba y el PSOE anunciará medidas de regeneración democrática tras el 9J
En la jornada que el Congreso aprobó la Ley de Amnistía pasó desapercibido otro hecho: una PNL de ERC para exigir leyes al Ejecutivo para la mejora de la calidad democrática que cosechó apoyos de Sumar, Junts y PNV y hasta en algunos puntos del PP.
México
Elecciones en México Raquel Gutiérrez: “La próxima presidenta hereda un país roto, muy polarizado, muy militarizado y muy violento”
La profesora, activista y pensadora mexicana se toma un momento para reflexionar sobre el panorama político, económico y social que deberá enfrentar la próxima presidenta de México, que se elige este 2 de junio
Urbanismo
medio ambiente El mar no espera: retrato de la regresión del litoral alicantino
La línea de costa mengua año tras año a causa de temporales marítimos y los estragos que generan diques, puertos, y espigones en las corrientes, que modifican la superficie arenosa.
Opinión
Opinión Frente el antisemitismo, Palestina libre
Los muros contra los, las y les otres, como el construido por Israel, se erigen como hipérbole del miedo a la pérdida de control en el interior de cada cual y en el Estado.

Últimas

Ocupación israelí
Genocidio en Gaza La comunidad palestina demandará al Gobierno español por incumplir la Ley de Comercio de Armas
El Gobierno sigue sin romper las relaciones militares con Israel y sigue permitiendo el tránsito de armas por territorio español, denuncia la comunidad palestina de Catalunya, que llevará al Ejecutivo central a los tribunales.
Ocupación israelí
GENOCIDIO EN GAZA La UPV/EHU recibirá 4,2 millones por colaborar en nueve proyectos europeos con Israel
Hasta tres universidades, así como cuatro entidades gubernamentales de Israel, acompañan a la Universidad del País Vasco-Euskal Herriko Unibertsitatea en iniciativas de la Unión Europea donde participan además empresas que contribuyen al genocidio.
Estados Unidos
Estados Unidos Trump es declarado culpable de 34 delitos, pero la condena no le impedirá presentarse en noviembre
El expresidente republicano hizo pagos a dos mujeres para encubrir sus relaciones sexuales y falsificó esos pagos en los documentos de su campaña presidencial de 2016. La sentencia será leída en julio.
Especulación inmobiliaria
Gentrificación ¿Por qué se levanta Lavapiés?: “Esta manifestación es solo el principio”
El tejido social del barrio convoca la gran manifestación del 1 de junio para visibilizar la recuperación de la movilización vecinal y denunciar la turistificación, la destrucción de los servicios públicos o el racismo institucional
Educación infantil
Educación en Madrid Cierra una escuela infantil pública de Arganda por falta de personal
El centro, gestionado por la empresa Atreyu Blota Carto, cuenta con más del 45% del personal de baja y sin reposición de puestos. 170 familias llevan sin clase desde el jueves.
Más noticias
Ocupación israelí
Genocidio en Gaza El sonido de las bombas en Gaza irrumpe en las calles de Logroño
Una quincena de activistas acampados en la Universidad de La Rioja ha trasladado el sonido de las bombas que día a día resuenan en Gaza a las calles de Logroño
Violencia machista
Precariedad laboral Huelga de 24 horas en el servicio de atención a las víctimas de violencia machista en Madrid
Las trabajadoras denuncian que el problema, que ya provocó paros parciales y concentraciones, se enquista. Las trabajadoras de la red denuncian falta de personal, de medios y de alojamientos para atender a las mujeres y sus hijos e hijas.
Sanidad
Sanidad pública de gestión privada El Hospital del Vinalopó seguirá privatizado pese a las 15.000 firmas en contra
Este viernes 31 de mayo finaliza el plazo para que se inicien los trámites de reversión al sistema público que el gobierno de Mazón no activará pese a la ausencia de informes que avalen la prórroga de la concesión.
Palestina
Acampadas Universitarias Palestina “Hay que seguir dando pasos para hacerle sentir a Israel como nos sentimos nosotros: solos y abandonados”
Muawia y Juan, palestino e israelí, han encontrado en la acampada por Palestina de la Universidad de Jaén, un espacio de encuentro que difícilmente podrían tener en su tierra. Un lugar seguro para resistir conjuntamente los envites de la ocupación y

Recomendadas

Palestina
Palestina Mustafa Barghouti: “Tiene que haber un embargo militar inmediato contra Israel”
El líder de Iniciativa Nacional Palestina saluda el reconocimiento del Estado por parte de tres países europeos pero exige que los gobiernos tomen nota de las demandas de los pueblos que piden medidas de boicot para aislar al régimen de Netanyahu.
Energías renovables
Energía y territorio Avalancha de macroparques solares en suelo rústico en Mallorca
La plataforma Renovables sí, però així no reclama una moratoria para frenar los más de 70 proyectos en tramitación que amenazan el campo isleño.
Literatura
Literatura Las escritoras de ‘clima ficción’ que llegan de América Latina
Autoras como Andrea Chapela, Clauda Aboaf, Adriana Bruno, Laura Ortiz o Silvia Moreno-García amplían los límites de la ciencia ficción o la fantasía en clave ecologista, decolonial y de memoria.