América Latina
Histórica protesta indígena en Brasilia ante un Bolsonaro alzado contra la justicia

Bolsonaro cumple con una de sus promesas electorales: “Ni un centímetro de tierra para los indígenas”. Ante un juicio decisivo, los pueblos originarios llevan dos semanas acampados en Brasilia para hacer valer sus derechos.
Manifestación contra las "políticas genocidas" de Jair Bolsonaro.
Manifestación contra las "políticas genocidas" de Jair Bolsonaro. Midia Ninja

@bertacamprubi

11 sep 2021 06:00

Miles de hombres y mujeres de los pueblos originarios de uno de los países con más diversidad étnica del mundo protestan desde junio y acampan en la capital brasileña desde el 22 de agosto exigiendo el derecho a sus territorios ancestrales. En el Supremo Tribunal Federal, la Corte Suprema ha empezado un juicio decisivo para el futuro de sus tierras. “Estamos aquí para decir a los invasores de nuestros territorios que no pasarán, incluso ante los intensos ataques a nuestros derechos fundamentales garantizados por la Constitución Federal de 1988”, predica la carta de la Articulación de Pueblos Indígenas del Brasil (APIB). Lo hacen ante el mundo, pues a instancias nacionales ya no existe dialogo con un Gobierno de extrema derecha aliado con los terratenientes y el agronegocio que flexibiliza desde su llegada al poder la legislación ambiental y en materia de protección a territorios indígenas permitiendo deforestación y masacre por parte de madereros y mineros ilegales. 

Brasil
Jornada de incertidumbre en Brasil La democracia en Brasil contiene la respiración en una jornada para el golpismo azuzado por Bolsonaro
Jornada de incertidumbre en Brasil con motivo de la celebración del 199 aniversario de su independencia. El presidente Jair Bolsonaro agita los fantasmas de la dictadura y llama a sus partidarios al asalto de la Corte Suprema.

Ataque al sistema jurídico que lo persigue

Mientras el expresidente Lula da Silva —quien aún no ha oficializado su candidatura— lidera las encuestas en la intención de voto de las elecciones de octubre de 2022, Jair Bolsonaro ha perdido popularidad después de más de 100 solicitudes de destitución aun no tramitadas por el presidente de la cámara, procesos jurídicos en su contra, por la creación de fake news y por una pésima gestión de la pandemia. Brasil, con 584.000 muertes, es el segundo país con más defunciones por coronavirus, solo superado por Estados Unidos, donde han fallecido más de 650.000 personas. Aun así, este 7 de septiembre, Día de la Independencia, se regocijaba con multitudinarias protestas de sus seguidores que siguen pidiendo una intervención militar y el cierre del Congreso y la Corte Suprema.

“A partir de este momento, el poder ejecutivo del Gobierno Federal junto a mis 23 ministros no nos vamos a someter”, gritaba el exparacaidista del ejército brasilero en la manifestación de Brasilia. Bolsonaro se refirió sutilmente al presidente de la Corte Suprema, Luiz Fux, cuando dijo que estaba “barbarizando nuestra población”. Unas 150.000 personas salieron en la capital en una de las ya tradicionales marchas verde amarillas mostrando su apoyo al presidente, un 5% de lo que él había previsto cuando amenazó con que dos millones saldrían a marchar en Brasilia, lo que equivaldría en realidad a toda la población del Distrito Federal. En São Paulo no fueron más de 120.000 según la alcaldía de esta gigante ciudad de más de 12 millones de habitantes.

Miles de personas provenientes de los pueblos originarios de Brasil llevan dos semanas acampados en la capital para defender sus derechos a los territorios ancestrales frente a la presión de los terratenientes respaldados por Bolsonaro

Así pues, Brasil tiene un presidente que amenaza la Corte Suprema y la separación de poderes delante de los que lo idolatran —ampliamente favorables al uso de armas, muchos exagentes y agentes de las fuerzas armadas— sin que haya, por ahora, ningún tipo de repercusión para él o su Gobierno. “Bolsonaro nunca ha sido suerte, siempre ha sido Dios”, rezaba una pancarta en la marcha de São Paulo. “SOS: Fuerzas Armadas con Bolsonaro en el poder”, suplicaba otra en Brasilia. “Nadie cerrará esta Corte, nosotros la mantendremos de pie”, afirmaba rotundo el presidente de la Corte Suprema Luiz Fux, en su carta de apertura de la sesión del juicio sobre la demarcación de tierras indígenas de este 8 de septiembre. La democracia liberal está en juego. “Todos sabemos que quien promueve el discurso del “Nosotros contra ellos” no propaga democracia sino la política del caos”, añadió Fux. 

Dos días después de sus amenazas de desacato, el 9 de septiembre, Bolsonaro se retractó públicamente de sus palabas con una “Declaración a la Nación” en la que afirmaba que nunca había tenido la intención de agredir a los jueces y que su tono se debía “al calor del momento”.

Protesta indígena en Brasilia contra las políticas genocidas del presidente Jair Bolsonaro.
Movilización indígena en Brasilia. Midia Ninja

La fuerza de las mujeres indígenas

Y mientras las camisetas verdes y amarillas y los tanques militares marchaban por la Plaza de los Tres Poderes entre cantos autoritarios y manos levantadas al estilo del saludo fascista, a pocos metros de distancia avanzaban 2.000 mujeres de 100 etnias diferentes, muchas descalzas, con pinturas de lucha y al sonido de las maracas, bajo el lema “Territorio: nuestro cuerpo, nuestro espíritu”. Algunas viajaron durante más de dos días para llegar a la capital. Las violaciones de derechos constitucionales, individuales, colectivos y territoriales, muchas veces son enfrentados en primera línea por ellas en las aldeas. Su presencia tan lejos de sus casas y comunidades busca también ejercer presión ante la Corte Suprema, pero no con amenazas sino con sus testimonios y la fuerza de su presencia. 

“El territorio indígena en Brasil sirve para la protección de todo el medio ambiente, no solo para la vivencia plena de los pueblos originarios sino la de todo el planeta”, afirma el ejecutivo del CIMI

Ellas y hasta 6.000 indígenas de 176 pueblos diversos acampados en la explanada de los ministerios desde el 22 de agosto exigen que no sea aceptada la tesis del Marco Temporal con la que los latifundistas respaldados por el Gobierno de Bolsonaro pretenden ganar el juicio por la posesión de la Terra Indígena Ibirama La Klãnõ de los pueblos xokleng, guarani e kaingang, en el estado de Santa Caterina, y la sentencia de la cual será jurisprudencia imprescindible para otras decenas de casos parecidos. Puede convertirse en el marco de una reparación histórica o en la antesala de una (otra) desposesión y colonización masiva de territorios indígenas. Según esta tesis, los pueblos indígenas pueden reivindicar la propiedad colectiva de sus tierras solo si ya hacían posesión de ellas antes del año 1988 cuando se aprobó la Constitución Política de Brasil. En el caso de Ibirama La Klãnõ, la tierra fue negociada con los colonizadores antes de 1952 pero con el tiempo las comunidades fueron siendo expulsadas y divididas a través de la deforestación, la construcción de una represa que inundó su aldea y la erosión de los terrenos que obligaron a las comunidades xokleng a aceptar trabajos en condiciones de explotación.

“El marco temporal sería una cobardía”, afirma Brasilio Priprá, líder xokleng de esta tierra. “En 1952 el Gobierno nos expulsó. Hay cementerios en las áreas de donde fuimos obligados a salir. Si se usa el marco temporal nos sacan nuestro derecho a la tierra. Si las comunidades no están hoy en esas áreas es porque otros llegaron, pero siempre estuvimos en ellas y cuando nos expulsaron pasamos a luchar por ellas”, afirma. Su abuelo fue asesinado en 1954 después de denunciar la violencia y la invasión que vivían los xokleng por parte de los colonizadores. 70 años después la violencia y la invasión siguen y le toca a su nieto seguir luchando contra los descendientes de esos mismos hombres.

 “Un juicio definitivo, estructural”

El juicio en la más altas instancias tiene lugar gracias a un recurso antepuesto por la Fundación Nacional del Indio (FUNAI) frente la decisión tomada por el Tribunal Federal Regional 4 de Santa Caterina en 2013 en la que se aceptaba el marco temporal. Según periodistas y expertos jurídicos, el juicio podría durar semanas o años. Por ahora, la Corte Suprema ha escuchado argumentos a favor y en contra de la tesis, donde destacaron la defensa de organizaciones indígenas como la Articulación de Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), en la que la mayor parte de pueblos indígenas del gigantesco país se sienten representadas o el Conselho Indigenista Misionero (CIMI), consejo fundado, entre otros, por el obispo de origen catalán Pedro Casaldáliga en los años 70. 

La Corte Suprema ha reconocido este juicio como de “repercusión general”, es decir, que lo que se decida “va a ser usado por todas las instancias judiciales brasileras y servirá para todos los pueblos indígenas del país”, explica Leste

Antonio Eduardo Leste, secretario executivo del CIMI, hace un poco de retrospectiva desde Brasilia: “La movilización indígena que culmina en campamentos en Brasilia se remonta de los años 2000, cuando sucedieron los campamentos Tierra Libre en los que se exigieron los derechos constitucionales de los pueblos indígenas que no se estaban efectivando”. Con el Campamento Lucha por la Vida, “los indígenas traen nuevamente a Brasilia el Levantamiento por la Tierra poniendo la tierra como prioridad”. Según Leste, de aprobarse, “el marco temporal limitará totalmente los derechos de los pueblos indígenas”. La Corte Suprema ha reconocido este juicio como de “repercusión general”, es decir, que lo que se decida “va a ser usado por todas las instancias judiciales brasileras y servirá para todos los pueblos indígenas del país”, explica Leste.

Las expectativas son inciertas, pero ya existen precedentes favorables para los originarios: uno de los 11 jueces de la Corte, Edson Fachin, quien actúa como relator de este caso, ya presentó su voto en un plenario virtual en junio y lo hizo en contra del marco temporal. “La pérdida de la posesión de tierras tradicionales para las comunidades indígenas significa el progresivo etnocidio de su cultura”, dijo Fachin, “se les estaría negando el derecho a la identidad y a la diferencia en relación al modo de vida de la sociedad envolvente, expresión mayor del pluralismo político asentado por el artículo 1 del texto constitucional”. También la Procuraduría General de la República presentó su parecer en contra del marco temporal.

Defensa del mundo entero

“El territorio indígena en Brasil sirve para la protección de todo el medio ambiente, no solo para la vivencia plena de los pueblos originarios sino la de todo el planeta”, afirma el ejecutivo del CIMI. “Los territorios de los pueblos originarios, la Amazonía por ejemplo, son territorio vital, indispensable para la vida en el planeta y eso está demostrado científicamente, por eso estamos luchando tanto. Los pueblos originarios ofrecen un servicio a la vida de todos los demás”, añade, preocupado. Mientras tanto el Gobierno de Bolsonaro tiene en marcha desde hace tres años un plan de entrega de los territorios tradicionales al capital privado, a las minerías, las madereras y el agronegocio, según denuncian las organizaciones indígenas. Y a pesar de eso, para el Gobierno español sigue siendo una prioridad ratificar el acuerdo UE-Mercosur que se traducirá en más violaciones de derechos humanos, deforestación y emergencia climática, y en el que es clave el país tropical. Solamente cuatro meses atrás, Jair Bolsonaro recibió la visita de la exministra de Exteriores española Arancha González Laya para seguir negociando los términos de este acuerdo.

Archivado en: Brasil América Latina
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Deforestación
Informe 'Fashion crimes' Una investigación vincula a Zara y H&M con la deforestación ilegal y la violencia en Brasil
La ONG Earthsight rastreó durante una década 816.000 toneladas de algodón ligadas al arrase de El Cerrado brasileño y a la violación de derechos humanos que acabaron en forma de prendas en las tiendas de Inditex y H&M en España.
América Latina
Andressa Caldas “Lo que vivimos en Brasil es una alerta respecto de lo que sucede ahora en Argentina”
Directora del Instituto de Políticas Públicas en Derechos Humanos (IPPDH) del Mercosur, Andressa Caldas analiza los desafíos a los derechos humanos y a la democracia de una nueva generación de gobiernos de extrema derecha.
Análisis
Análisis El apoyo de Lula da Silva a Palestina tiene un alto precio
Al igual que el ejecutivo sionista de Netanyahu, la clase dirigente brasileña que vocifera contra Lula da Silva por denunciar el genocidio cometido por Israel, también cree en el fondo que los palestinos son realmente “animales humanos”.
Procés
Catalunya Alerta Solidària calcula que la Ley de Amnistía podría aplicarse a al menos 419 manifestantes y activistas
El Congreso votará en la sesión de hoy la norma. Dos terceras partes de las causas penales que Alerta Solidària conoce ya han sido archivados o han obtenido sentencia absolutoria.
Euskal Herria
Euskal Herria El ‘Triángulo de las Bermudas’ de los fondos Next Generation engulle la transición ecosocial
Cubren el 18% de la inversión de Mercedes en Araba: 185 de 1.000 millones de euros para empezar a fabricar furgonetas eléctricas al alcance de bolsillos pudientes. Los Next Generation están condicionados a contrarreformas y una deuda mutualizada.
Cómic
Cómic ‘Grendel’ o el atractivo del supervillano
Hablar de ‘Grendel’ es hacerlo de uno de los títulos más transgresores y sorprendentes que nos ha brindado el cómic. Una forma única de profundizar en un personaje a través de una perspectiva múltiple capitaneada por un crecido Matt Wagner.
Residuos
Residuos Una investigación constata que Ecoembes manipula las cifras de recogida selectiva de botellas
El estudio de la consultora Eunomia reduce la tasa de recogida selectiva de botellas de plástico al 36%, mientras que Ecoembes aduce un 71%. La cifra es clave: si no llega al 70%, España deberá implantar un sistema de devolución y depósito.
Italia
Derechos a la salud ¿Se hunde la sanidad pública en Italia? Los ricos se saltan la cola
La desinversión en sanidad de los últimos años ha conducido a una carencia de profesionales sanitarias y a la proliferación de servicios de urgencias privados, en los que se paga para sortear las largas esperas que afectan a los centros públicos.
República
Movilización en Madrid Izquierda Unida, Podemos y más de cien organizaciones apoyan la marcha republicana del 16 de junio
Promovida por ateneos republicanos, la marcha republicana acumula más de cuatro mil firmas de apoyo y quiere cortocircuitar los fastos del décimo aniversario de la coronación de Felipe de Borbón.

Últimas

Palestina
Acampadas pro palestinas La Universidad de Sevilla y la Universitat de València rompen relaciones con Israel
La acampada de la Universidad Politécnica de València sufrió ayer un intento de desalojo fallido y el centro ha cancelado la feria de empleo prevista para hoy por la presencia de la protesta.
Contigo empezó todo
El Salto libros El Salto lanza su propia línea editorial con un libro sobre la otra historia de España
El Salto Libros se estrena con el volumen ‘Contigo empezó todo’, del periodista Eduardo Pérez, otra visión de la historia de España a través de 30 episodios olvidados. Suscríbete y te lo enviamos gratis.
Educación pública
Educación inclusiva Ayuso deja sin plaza en colegios ordinarios a ochenta alumnos y alumnas con autismo
Familias, agrupadas en la plataforma Defensa del Alumnado TEA, contabilizan ya casi un centenar de denegaciones para que alumnos y alumnas acudan a colegios ordinarios.
Sphera
Elecciones europeas Vídeo: ¿Qué nos jugamos en derechos LGTBIQA+ en las próximas elecciones europeas?
La Unión Europea cuenta con una estrategia para la igualdad de las personas LGBTIQ 2020-2025. Del 6 al 9 de junio se celebran las elecciones europeas.
Memoria histórica
Memoria democrática El rechazo a la Ley de la Concordia se hace visible en las calles de València y Alicante
Asociaciones memorialistas del País Valencià se movilizan por la legitimación del franquismo en la Ley de la Concordia, que califican como un retroceso en la memoria histórica.
Más noticias
El Salto Twitch
El Salto TV Los ricos ya no lloran, los ricos evaden
En el programa Economía Cabreada del 28 de mayo debatimos sobre impuestos en el marco europeo a las puertas de las elecciones con Susana Ruíz de Oxfam y Carlos Cruzado, del Sindicato de Técnicos de Hacienda.
Palestina
Palestina El estudiantado cordobés se moviliza por Palestina: encierro en la UCO y exigencias al rector
Medio centenar de jóvenes han pasado la noche del martes en la Facultad de Filosofía y Letras, sumándose así a la ola internacional de apoyo a Palestina en las universidades.
Ocupación israelí
ACUERDOS CON ISRAEL Un grupo de la UPV/EHU colabora en un proyecto europeo con un centro israelí vinculado al genocidio
QUENCH es una colaboración científica con el Israel Institute of Technology, que desarrolla los bulldozers teledirigidos usados en las demoliciones de casas palestinas.
Bebés robados
Bebés Robados La ley de bebés robados vuelve al Congreso por tercera vez
Siete años después de su primera entrada en la cámara, la propuesta de ley para la investigación del robo de bebés durante el franquismo y los primeros años de la democracia será tramitada de nuevo gracias a la lucha de las asociaciones.

Recomendadas

Inteligencia artificial
Inteligencia artificial IA y crisis climática: las grandes tecnológicas escogen España para instalar sus gigantescos centros de datos
El boom de la IA ha disparado las necesidades de computación de los centros de datos y su consumo de agua. Las grandes tecnológicas buscan nuevas regiones para instalarlos. España entre ellos.
Unión Europea
Fronteras La ultraderecha prepara su asalto al Parlamento Europeo capitalizando el discurso antiinmigración
Las encuestan apuntan a una mayor representación en la Eurocámara de los dos espacios políticos de extrema derecha, mientras los países que demandan un endurecimiento del Pacto de Migración y Asilo son mayoría.
Memoria histórica
Eduardo Pérez “Quería recordar a las mejores generaciones que han pasado por España”
El periodista Eduardo Pérez, colaborador habitual de El Salto, firma ‘Contigo empezó todo’ un libro que rescata 30 momentos estelares de la otra historia de España, olvidada, silenciada y vilipendiada por el relato oficial.