Laboral
Adiós al trabajo

Hasta los empleos considerados más seguros sienten la amenaza de pérdidas de derechos, poder adquisitivo, menores salarios, peligro de desaparición y una mayor flexibilidad que termina produciendo precariedad.

Hay quienes han decidido dar por muerto al trabajo. Hay quienes se ganan la vida disertando sobre la muerte del empleo. Hace casi 30 años que un tal Jeremy Rifkin anunció El fin del trabajo. Desde entonces el fenómeno del paro estructural en torno al 10% se ha consolidado como una realidad en numerosos países. 

Análisis
Precariedad y salud mental Trabajar por cuatro duros: precariedad laboral, malestar psíquico y lucha colectiva
Hace falta volver a dignificar el trabajo. Incorporar una nueva agenda para hacer del trabajo un lugar democrático, amparado por los derechos de las personas.

Se trata de ese porcentaje persistente de personas en edad de trabajar y que quisieran hacerlo, pero que no van a encontrar trabajo por mucho que lo intenten. Personas que pasan a formar parte de ese grupo de inempleables, de expulsados del trabajo y que, tras la voladura programada de los sistemas de protección social, se han convertido también en excluidos, pobres, marginados.

Es tarea de la clase trabajadora ahuyentar el fantasma de la desaparición del empleo y conjurar la maldición de un trabajo precario, pobre y sin derechos

Pese a los anuncios reiterados de un fin del trabajo, la realidad es que trabajar sigue aportando prestigio social y no trabajar sigue siendo considerado un estigma, como si quien no trabajase fuera culpable de algo. En ese camino, a lo largo de ese recorrido, han ido apareciendo los trabajos precarios, el subempleo, o esos trabajos inútiles, perniciosos incluso, que David Graeber ha definido como Trabajos de mierda.

Laboral
Precariedad La hora complementaria: la hora extra que disciplina a las trabajadoras
El AENC fomenta aumentar las horas complementarias vía convenio colectivo hasta el máximo permitido por el Estatuto de los Trabajadores, un 60%.

Puede que legalmente los contratos que eran precarios hayan pasado a ser denominados de forma consensuada como contratos fijos. La realidad es que los contratos son inseguros, el tiempo de trabajo es parcial, especialmente entre las mujeres, con libre disposición horaria por parte del empleador. La alternancia de trabajo y de inactividad forma parte de la realidad laboral de nuestros jóvenes, de muchas mujeres. Las tareas extraordinarias no remuneradas son moneda común. 

Son cosas que pasan en nuestra España, tanto en el sector privado como en el público. Cosas que padecen especialmente las mujeres y los jóvenes, condenados al tiempo parcial no deseado, a las becas, pasantías y prácticas no remuneradas. Nos lo recuerda reiteradamente la Unión Europea, pero no terminamos de poner remedio nunca, entregados como estamos a asuntos y escándalos políticos que dan más votos. 

Junto al fenómeno de los expulsados del empleo, los excluidos de la sociedad y los trabajadores precarizados encontramos la paradoja de que quienes se supone que son trabajadores estables, que se entregan a la vorágine de las jornadas sin desconexión posible, atenazados por los correos electrónicos, el móvil, atender a los whatsapp y nutrir permanentemente las redes sociales.

Tener un trabajo fijo no significa haber vencido la precariedad. A la dedicación permanente tenemos que añadir la formación continua, la digitalización expansiva, la autoevaluación y las evaluaciones externas, la eficacia y la eficiencia, la productividad y la exposición constante en mitad de la plaza pública, donde podemos ser visualizados, juzgados, en todo momento.

Trabajar en plataformas significa compartir, pero significa también competir sin descanso

Son muchas las personas que trabajan en plataformas. Trabajar en plataformas significa compartir, pero significa también competir sin descanso. Cientos de miles de personas que transportan mercancías, que reparten productos, que realizan tareas de mantenimiento, prestan servicios de limpieza, o de cuidados personales.

No nos damos cuenta, pero la degradación del trabajo en las plataformas termina por afectar a todos los empleos. No están sólo en las grandes ciudades, también en las pequeñas localidades. Entran en nuevos sectores, pero también en otros tradicionales como la agricultura. 

Explotación laboral
Uberización La rabia contra el algoritmo se organiza en Bruselas
El Consejo Europeo ha tumbado la primera directiva sobre sus condiciones de trabajo. Los trabajadores del sector siguen su progresivo proceso de organización por sus derechos.

Parecen un signo de los nuevos tiempos, pero suponen la única forma de supervivencia para muchos de esos trabajadores que han pasado a ser conocidos como trabajadores pobres. Personas con trabajo, pero que no pueden garantizar su suficiencia económica, ni su autonomía social, familiar, personal. 

Es cierto que hay trabajos seguros, con derechos bien regulados y bien pagados, pero también han aumentado los trabajos precarios, mal pagados, inestables. Se ha producido una fractura mayor en el empleo. 

En general, todos los puestos de trabajo se han visto afectados por esta dinámica. Hasta los empleos considerados más seguros sienten la amenaza de pérdidas de derechos, poder adquisitivo, menores salarios, peligro de desaparición y una mayor flexibilidad que termina produciendo precariedad. 

Esa es la tarea que la clase trabajadora tiene por delante si consigue ahuyentar el fantasma de la desaparición del empleo y conjurar la maldición de un trabajo precario, pobre y sin derechos. Si consigue sacar fuerza de flaqueza y recuperar la conciencia de sí misma y el orgullo de su historia y de su voluntad de existir. 

No será fácil, pero esa es la tarea. 

Archivado en: Laboral
Sobre este blog
El espacio para la libre expresión de los socios y las socias de El Salto. Si quieres participar sigue los pasos que encontrarás en Cómo publicar en el Blog de las Socias. El Salto no se responsabiliza de las opiniones que sus socios/as expongan en este blog.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Explotación laboral
Derechos laborales Condenan a Marina Beach por despedir a una trabajadora que se quejó por whatsapp
La trabajadora pidió por el grupo de chat de la empresa que cubrieran las necesidades básicas de material que tenían los empleados y fue despedida.
Sanidad pública
Conciliación en entredicho Enfermeras denuncian que hospitales madrileños están bloqueando reducciones de jornada
De cara al próximo verano grandes hospitales de la Comunidad de Madrid están impidiendo que las profesionales del sector de la enfermería acumulen horas para poder librar días enteros, derecho adquirido que va en retroceso.
Sobre este blog
El espacio para la libre expresión de los socios y las socias de El Salto. Si quieres participar sigue los pasos que encontrarás en Cómo publicar en el Blog de las Socias. El Salto no se responsabiliza de las opiniones que sus socios/as expongan en este blog.
Ver todas las entradas
Elecciones
Elecciones europeas La izquierda lleva sus cuentas pendientes a unas Europeas que ponen a prueba el contraataque de Sánchez
El Partido Popular y Vox plantearán una campaña en clave nacional contra el “sanchismo”. El presidente del Gobierno ha salido reforzado en las encuestas tras las elecciones catalanas pero no superará al PP según una reestimación de datos del CIS.
Desigualdad
Desigualdad Gary Stevenson: “Permitimos que el debate económico esté dominado por ricos y eso conduce a una idiocracia"
El londinense pasó de ser el 'trader' más rentable de uno de los mayores bancos del mundo a convertirse en un activista contra la desigualdad y contarlo todo en su primer libro.
Extractivismo
Extractivismo Varela y su arena: una lucha por la supervivencia en Guinea Bissau
En una pequeña localidad de Guinea-Bissau, un grupo chino, apoyado por actores senegaleses y el propio Estado guineano, planea explotar los recursos minerales y la arena de la región.
Genocidio
Tribuna 18 noches en el lado correcto de la historia
VV.AA.
Entre infantilizaciones y denuncias de radicalización, desde la Acampada por Palestina de Madrid reclamamos con voz propia una ruptura de relaciones con Israel.
Contigo empezó todo
El Salto libros El Salto lanza su propia línea editorial con un libro sobre la otra historia de España
El Salto Libros se estrena con el volumen ‘Contigo empezó todo’, del periodista Eduardo Pérez, otra visión de la historia de España a través de 30 episodios olvidados. Suscríbete y te lo enviamos gratis.

Últimas

Genocidio
Genocidio La Corte Internacional de Justicia ordena a Israel detener la ofensiva de Rafah de manera inmediata
El Tribunal de la ONU da un nuevo aviso al Gobierno de Netanyahu y le ordena detener la ofensiva de Rafah ante la constatación de que sus anteriores órdenes no han sido cumplidas.
Palestina
William Schabas “Vemos cómo el derecho internacional puede usarse a favor de los estados del Sur Global”
Este abogado analiza la trascendencia de la solicitud de órdenes de detención contra Netanyahu y Gallant tomada por el Tribunal Penal Internacional en el marco del genocidio llevado a cabo por Israel en Palestina.
Extrema derecha
Opinión “La alianza global de los patriotas” y el oxímoron “anarcocapitalista”
Tanto la extrema derecha de Milei como la de Abascal pueden confluir en que la ‘libertad’ sea reducida sólo al privilegio de acumular, en un ‘fascismo de mercado’.
Barcelona
Espacio público El Parque de Louis Vuitton y el vecindario fuera del Güell
Cientos de vecinos se manifestaron contra la privatización que el Ayuntamiento de Jaume Collboni ha hecho del parque público más emblemático de Barcelona para acoger un desfile de la marca de lujo francesa que patrocina la Copa América de vela.
Arte
Arte El arte visual de Mahmoud Alhaj ilustra la huella de la violencia de Israel en Palestina
El artista Mahmoud Alhaj expone en Barcelona su proyecto ‘Violence 24/7’, una alegoría visual sobre los efectos que la ocupación israelí tiene en los sujetos, la conciencia y la geografía palestina.
Más noticias
Palestina
Palestina Cientos de estudiantes toman la Universidad Humboldt de Berlín en apoyo a Gaza
La ocupación de la institución, renombrada “Instituto Jabalia” en honor al campo de refugiados de Gaza, termina con el desalojo de la policía 30 horas después.
Explotación laboral
Derechos laborales Condenan a Marina Beach por despedir a una trabajadora que se quejó por whatsapp
La trabajadora pidió por el grupo de chat de la empresa que cubrieran las necesidades básicas de material que tenían los empleados y fue despedida.
Minería
Mineras contra el territorio La minera que provocó un conflicto en Groenlandia irrumpe con proyectos en Castilla y León y Extremadura
La polémica compañia australiana ETM, protagonista del convulso proyecto de Kvanefjeld (Groenlandia), tras los planes extractivistas de Villasrubias y El Payo (Castilla y León ) y Salvaleón, en la extremeña Sierra de Gata.
Centrales nucleares
Nucleares Cuando una nuclear cierra
El cierre de centrales nucleares es común, con 213 ya cerradas y solo 60 en construcción. Desmantelarlas es complejo, como en Almaraz I, cuyo proceso iniciará antes de 2027.

Recomendadas

Sanidad pública
Conciliación en entredicho Enfermeras denuncian que hospitales madrileños están bloqueando reducciones de jornada
De cara al próximo verano grandes hospitales de la Comunidad de Madrid están impidiendo que las profesionales del sector de la enfermería acumulen horas para poder librar días enteros, derecho adquirido que va en retroceso.
Fake news
Investigación Así se financia la desinformación en Murcia: ‘OkDiario’ y ‘EsDiario’, los favoritos de López Miras
El Gobierno murciano ha repartido más de 240.000 euros a medios de desinformación en los dos últimos años. De ellos, Eduardo Inda se ha embolsado casi la mitad y EsDiario 54.355 euros.
Cine
Cine y vivienda ¿Dónde están los desahucios en las películas españolas?
Con excepciones señaladas como ‘En los márgenes’ o ‘Antidisturbios’, el conflicto de la vivienda sigue ausente de las ficciones que aspiran a retratar nuestro presente.