15m puerta del sol
La Puerta del Sol de Madrid, lugar donde prendió la chispa del movimiento 15M David F. Sabadell

15M
15M, los mejores días

Las huellas del 15M se aprecian en los tejidos vivos de las ciudades y pueblos. Las despensas solidarias levantadas durante el estado de alarma no habrían sido posibles sin el 15M, tampoco se habrían parado decenas de miles de desahucios. El lenguaje de 2011 aún permanece vigente, a la espera de que otro impulso lo encuentre y lo supere.

¿Qué se quiere contar cuando se escribe sobre el 15M? ¿Cuál es el sentido de recuperarlo como efeméride? Posibles respuestas: convertirlo en un fósil, algo insípido que queda bien en las estanterías, algo del tipo “dónde estabas tú cuando se tomaron las plazas”. Puede servir para tratar de legitimar un proyecto político actual (suerte a quien lo intente), para reivindicar el valor intrínseco de las utopías o para lamentarse por lo que fue el canto del cisne de una generación que, en la siguiente década, se vio arrasada, expuesta a la burbuja del alquiler o expulsada a la migración. Las más de las veces, los textos sobre el movimiento del 15 de mayo, llamado en su día de “los indignados”, servirán para llevar a cabo un ejercicio de nostalgia, más o menos bella, escasamente útil si no trata de neutralizar el efecto paralizante de la nostalgia. 

El objetivo de este texto y de esta selección fotográfica es recapitular, tratar de explicar a quienes no tenían edad de estar allí cómo surgió el 15M, qué fue el movimiento que se llamó la “Spanish Revolution” y cómo quiso cambiar el sistema a través de un cambio del lenguaje y de la forma de relacionarse con la política. No juzgar sus éxitos y fracasos sino recordar su valor para proponer una transformación colectiva sin precedentes desde, al menos, los años 60 y 70. Es obvio que el texto, no así las fotos, fracasará en ese intento. No se puede resumir la experiencia de cientos de miles de personas que sintieron, durante unos días, unos meses e incluso algunos años, que encontraban un sentido político que estaba cifrado en esos tres signos, “15M”. Apenas se pueden aportar una serie de datos, hechos y perspectivas que acompañen a quienes vivieron de ese modo radical la expansión de la “política de las plazas” y que aclaren algo a quienes no lo hicieron. 


El punto de arranque es una manifestación. Convocada un domingo, 15 de mayo, por actores políticos novísimos, sin apenas tradición organizativa. Es una manifestación que transcurre plácidamente por las calles del centro de Madrid y se disuelve, o casi se disuelve, en la Puerta del Sol, el kilómetro cero de la red viaria española. Tras ese final, un comienzo casi olvidado. Un grupo de jóvenes se dirige a Callao. Interviene la policía. Un pequeño torrente de humanos baja a la carrera por la calle Preciados. El torrente se divide de nuevo en Sol. Un grupo prosigue la carrera hacia la plaza de Jacinto Benavente. Otro decide sentarse pacíficamente en una esquina de Sol. Los antidisturbios dudan si cargar contra esa sentada. Forman un cordón, se colocan los cascos. El puñado de manifestantes se mantiene firme. No están cortando el tráfico, simplemente aguardan la carga. Lo que viene tras la orden o la decisión de no cargar es la propuesta de acampar allí. 

El lunes 16, Delegación de Gobierno revoca la idea inicial de no desalojar. Ese error dará pie a todo lo demás. Se produce una concentración, apretada, abigarrada. Cientos de manifestantes se quedan hombro con hombro para defender la posición ganada. La convocatoria se repite al día siguiente. El martes llueve. Alguien tira una lona desde una farola a otras tres. Así se pasa de la acampada al campamento, al asentamiento y el pequeño poblado laberíntico que se levantará durante casi dos meses en Sol. 

El repertorio de las acampadas tuvo su recorrido antes, pero la idea parece nueva. Las siguientes semanas confirmarán que lo es. La combinación entre los cuerpos reunidos en torno a la acampada y las ideas vertidas en las redes sociales transforma el mapa político en pocas semanas. Es una primavera en la que cambiar el estado de las cosas parece tan sencillo como hacer bocatas para todas las personas que caben en una asamblea. Solo cuestión de voluntad.

Se han producido réplicas en distintas ciudades. Sevilla, Barcelona, Málaga, Bilbao, Las Palmas, Palma de Mallorca o Santander. ‘Expats’, trabajadores migrantes españoles, se plantan en las embajadas de Londres y Estambul. En unos minutos esas acampadas dejan de ser réplicas para ser movimientos autónomos interconectados. El 15M se extiende asimétricamente. Arraiga poco en el País Vasco y se convierte en otra cosa en Barcelona. En la plaza de Catalunya se elabora un programa político detallado y también se resiste a un intento de desalojo en el que los Mossos d’Esquadra se desempeñan con dureza contra las personas de la acampada. Se trazan líneas tangentes que cruzan los conceptos de soberanía y derechos económicos, líneas que llegarán hasta hoy confundidas, distorsionadas y fundidas en el proyecto político de la independencia de Catalunya. Una altra cosa.

En octubre surge Occupy London, que toma el relevo a Occupy Wall Street, que toma el relevo al movimiento Syntagma, que toma el relevo al 15M, que tomó el relevo de las primaveras árabes. Se han abandonado los núcleos centrales de la protesta pero la descentralización funciona aún unos meses más. Nacen los stop desahucios y les suceden las mareas, por la sanidad, por la educación. En octubre se impulsa la primera jornada de protesta global contra la austeridad. Las fechas y las movilizaciones se suceden unas a otras. Dos huelgas generales ponen las políticas de la austeridad contra las cuerdas. 

El 15M transforma también las relaciones sociales e interpersonales. Es un cursillo acelerado de cultura política, también para los viejos militantes. La retirada de una pancarta feminista bajo el grito “¡La revolución no es cuestión de sexos!” es respondida con pedagogía y con la conciencia clara de que esa victoria es inminente. El movimiento feminista será el más importante del siglo XXI, 2011 es un paso en la expansión de sus principios: los de la no violencia, la horizontalidad, la visibilización de las tareas reproductivas. 

El 15M es también una máquina de crear lemas, una explosión colectiva de ingenio. El propio concepto recuperado de “plaza” como espacio de creación política es la consigna. Está teniendo lugar una revolución en la gramática y el vocabulario. Nos quieren en soledad, nos tendrán en común, nuestros sueños no caben en sus urnas, lo llaman democracia y es Botín. 

La transformación cultural del 15M aún perdura. La reacción también. El sistema responde súbitamente. Lo han entendido todo. La Ley de Seguridad Ciudadana de 2012 amordaza la disidencia e impone el lenguaje de la sanción administrativa. La abdicación del rey Juan Carlos I es la señal de que el error del sistema ha requerido la instalación de una nueva versión. El final de la década cambiará el vocabulario. No sobrevivirán las consignas a un tiempo radicales e ingenuas del movimiento —“no somos mercancías en manos de políticos y banqueros”— y se impondrá la gramática cuartelera del “a por ellos”. El lenguaje y el derecho penal del enemigo se dan la mano.

Una década después, ¿qué se quiere contar cuando se escribe sobre el 15M? Hay un recuento nostálgico, pero también el reconocimiento de lo que somos lleva a contestar que el 15M fueron los mejores días de nuestra vida, aquellos en los que parecía posible la construcción de un proyecto común, radicalmente democrático, republicano en el sentido amplio del término. La nostalgia, sin embargo, puede ser paralizante, puede incapacitar para reconocer cuándo y dónde salta la chispa de otro movimiento que, en su radicalidad, cambia todo a su paso. 

Mientras tanto, las huellas del 15M se aprecian en los tejidos vivos de las ciudades y pueblos. Las despensas solidarias levantadas durante el estado de alarma no habrían sido posibles sin el 15M, tampoco se habrían parado decenas de miles de desahucios. El lenguaje de 2011 aún permanece vigente, a la espera de que otro impulso lo encuentre y lo supere.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Literatura
Javier Gallego “Es más necesario que nunca que haya una información al margen de lo que ocurre en el centro”
El comunicador Javier Gallego debuta en la novela con ‘La caída del imperio’, el relato de un frenético y largo fin de semana que concluye con el estallido del 15M.
Opinión
Opinión Garzón y los puritanos
No, los expolíticos de la izquierda no se tienen que conformar con tocar la flauta en los centros sociales o hablar para cuatro pirados. Pero sí, también tienen un vínculo con aquellos con quienes compartieron un proyecto político.
Represión
Represión Violencia e impunidad policial durante el 15M: España se enfrenta de nuevo al TEDH
VV.AA.
26 personas detenidas en el marco de las protestas del 15M y maltratadas en la Comisaría de Moratalaz elevan su búsqueda de justicia al TEDH, ante la inacción de la justicia española.
#90186
16/5/2021 11:58

Para algun@s algo cambio. Los más espabilados acabaron con sueldos de 70K. Para el resto todo sigue igual.

11
0
#90183
16/5/2021 11:47

Para cuando un análisis crítico del papel que jugó Podemos en la desmovilización generalizada que supuso el "asalto a las instituciones"?. Parece que desde el Salto, hay un miedo subyacente a hacerse una autocrítica en este sentido. El 15 M que nació para poner en tela de juicio el papel de la democracia representativa y el organigrama de la misma en el Estado español en defensa del poder del Capital y de los intereses de la clase dominante fue enterrado por Podemos para sublimar las instituciones, la constitución y el consenso.

14
0
Yago Álvarez
16/5/2021 12:33

Hola, justo ayer también publicamos esta otra columna que creo que encaja muy bien con ese análisis que reclamas. Esperamos que te guste, un saludo. https://www.elsaltodiario.com/15m/que-diez-anos-no-son-nada-podemos-y-el-15-m

3
6
#90164
16/5/2021 3:31

No nos engañemos, por mucho que los medios inventasen, la realidad es que el 15M era un movimiento muy moderado tanto en las formas como en el fondo. Fué casi algo esperado que grán parte de los allí presentes acabaran creando partidos políticos para integrarse en poco tiempo en el régimen. Quizás lo sorprendente fué que estas personas olvidaran de un plumazo todo lo aprendido, si es que aprenfieron algo, y de repente les vieras alabando al lider, enterrando las asambleas, arrodillandose al capital o fabricando consensos con aquellos que mienten, roban, encarcelan y oprimen (*el consenso era una figura para unir en las decisiones a todos los que nos oponíamos a la tiranía de políticos y banqueros, no para ponerse de acuerdo con tiranos y explotadores. Importante la diferencia)

Casi más interesante fué lo que vino después del 15M; la lucha de los mineros, la Huelga General, Rodea el Congreso, En Pie, Las Marchas de la Dignidad... Con más conciencia de clase, mejor organización, concretando la ruptura política y económica. Desgraciadamente la porra salvaje del estado (UIP, CNP, GC) junto a la pata izquierda del régimen (ccoo, ugt, pce, sindicato de estudiantes) evitaron una vez más el intento de democratización condenando a una nueva generación de jovenes al exilio, el paro o el suicidio

10
3
#90154
15/5/2021 20:00

Que Madricéntrico!
Igual que la manifestación se gestó en la horizontalidad de ciudades de todo el estado, ese trabajo previo estaba en todas las plazas cuando se solidarizan con la capital, expuesta mediáticamente.

11
0
#90147
15/5/2021 17:48

Nada es igual. Todo cambio. Los herederos del 15M, las plataformas municipalistas y Podemos han llegado al poder. Nunca los poderes económicos se han gastado tanto dinero en medios de comunicación y periodistas como ahora para derribar a los herederos del 15M. El legado está ahí y, como toda aportación histórica, seguirá alumbrando futuros.

1
10
#90141
15/5/2021 15:14

Mucho 15 M pero al final mayoría absoluta para Mariano Rajoy . 😖🇪🇸🤣

6
6
#90121
15/5/2021 12:37

15 M, la película.

12
1
#90107
15/5/2021 10:44

Está claro que si las reivindicaciones de la calle se institucionalizan, gana el Sistema. En esa trampa cayó parte del espíritu de este movimiento con la creación de Podemos. Las cotorras televisivas no dejaban de lanzar el anzuelo, con la excusa de "democratizar" (dominar) ese levantamiento popular y una década después y tras demostrar que se podía llegar a sus poltronas de poder, se empezaron a poner nerviosos y empezó la guerra sucia y la creación de pseudopartidos, a cada cual más fascistas, con la sorpresa de Vox. La oligarquía empresarial, la corrupta política de siempre, bancos, fuerzas represivas, medios de manipulación oficiales...se pusieron manos a la obra para descreditar y criminalizar al partido morado, que fue quemándose creyendo que les iban a apoyar tod@s los que se echaron a las plazas. Hay que decir que muchos jóvenes de los que estuvieron, sobre todo en Madrid, les daba igual las verdaderas reivindicaciones, es más, pondría la mano en el fuego que parte de los acampados ya están dentro del universo PPVox. Una ilusión, que como la Primavera árabe, han logrado domesticar. ¿Se podría llevar a cabo un nuevo 15M en la actualidad? Creo que no.

10
6
#90114
15/5/2021 11:17

La traición del partido del régimen, Podemos.

14
3
Palestina
El 28 de mayo España, Irlanda y Noruega anuncian el reconocimiento oficial de Palestina como Estado
El 28 de mayo, Palestina será oficialmente un Estado para España, Noruega e Irlanda. Los tres países han anunciado esa fecha como la del reconocimiento oficial de Palestina como Estado.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Una demanda colectiva contra CaixaBank intenta anular 16 cláusulas abusivas en contratos de alquiler
El Sindicat de Llogaters lleva a la justicia a esta entidad financiera, a la que acusa de abusos sistemáticos en pisos de protección oficial levantados con subvenciones públicas por la Obra Social de la Caixa.
Fake news
Investigación Así se financia la desinformación en Murcia: ‘OkDiario’ y ‘EsDiario’, los favoritos de López Miras
El Gobierno murciano ha repartido más de 240.000 euros a medios de desinformación en los dos últimos años. De ellos, Eduardo Inda se ha embolsado casi la mitad y EsDiario 54.355 euros.
Contigo empezó todo
El Salto libros El Salto lanza su propia línea editorial con un libro sobre la otra historia de España
El Salto Libros se estrena con el volumen ‘Contigo empezó todo’, del periodista Eduardo Pérez, otra visión de la historia de España a través de 30 episodios olvidados. Suscríbete y te lo enviamos gratis.

Últimas

Música
Tendencias “Solo soy una chica”: lo ‘coquette’ y su presencia en la estética musical
Romanticismo y nostalgia son los dos ingredientes que sustentaron el nacimiento de lo ‘coquette’, una tendencia que se apoderó de TikTok desde principios de 2022 y que tuvo su punto álgido en 2023.
Laboral
Laboral El Consejo de Ministros aprueba la prevalencia de los convenios colectivos autonómicos y provinciales
La medida entrará en vigor el miércoles 22 de mayo cuando el BOE publique el decreto. La prioridad no será de facto: los provinciales solo tendrán prioridad si tienen un convenio autonómico superior o un acuerdo interprofesional previo.
Violencia machista
Recortes La precariedad laboral amenaza la atención a las víctimas de violencia machista del País Valencià
Trabajadoras de los Centros Mujer 24h y el Servicio de Atención Telefónica se movilizan “cansadas de promesas incumplidas” y una situación laboral que pone en riesgo su estabilidad y la calidad de la atención.
Infraestructuras
Infraestructuras El Ayuntamiento de Donostia descarta la construcción de un parque de surf en Antondegi
El consistorio de la capital guipuzcoana recalificará como terreno rural el área en la que la empresa Wavegarden pretendía colocar una piscina de olas artificiales
Más noticias
Tribuna
Tribuna A propósito del Día de la Diversidad, reflexiones abiertas desde el sindicato LAB
El colectivo migrante —heterogéneo y diverso— merece tener reconocidos todos los derechos fundamentales. Y esto aún no sucede en Euskal Herria.
Sidecar
Sidecar Un alivio temporal para Assange
El Tribunal Supremo británico ha permitido que Julian Assange recurra su inminente extradición. Washington no ha aportado las garantías para un juicio justo. El Gobierno británico ha hecho de él un “enemigo del pueblo”.
Residuos
Investigación Tenemos microplásticos en los testículos
Un estudio publicado en la revista 'Toxicological Sciences' encuentra partículas plásticas en la totalidad de los genitales masculinos de perros y humanos analizados.
Análisis
Neoliberalismo Aquelarre fascista en Madrid: el auge de la aporofobia
El desaguisado argentino, VOX, Meloni, Le Pen, Trump, Bolsonaro, … son la consecuencia final lógica de un sistema de gobernanza que ya ha fracasado, el neoliberalismo.

Recomendadas

Genocidio
Genocidio Karim Khan: el tipo duro que ha puesto contra las cuerdas a Netanyahu y de los nervios a Biden
La decisión de la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional de solicitar órdenes de detención contra los jerarcas israelíes responsables de la masacre de Gaza genera división entre los países europeos e indigna al gobierno de Estados Unidos.
Alemania
Extrema derecha “Es imposible confiar en el Estado alemán y su policía en la lucha contra los neonazis”
En Alemania, el movimiento antifascista se enfrenta a una oleada de represión, mientras que las elecciones de septiembre auguran la victoria del partido de extremaderecha Alternativa para Alemania en diferentes estados.
Biodiversidad
Biodiversidad Natura 2000: una red de protección medioambiental amenazada por la agricultura
La pieza central de las políticas de protección medioambiental ha sido incapaz de frenar el avance de la agricultura intensiva en zonas sensibles. Visitamos tres ecosistemas protegidos en España, Portugal y Alemania para comprobar su impacto
Feminismos
Feminismos Ana Requena y June Fernández: periodistas, feministas… e intensas
Estas dos comunicadoras comparten amistad, oficio y edad: cumplirán este año los temidos cuarenta. Por fortuna, en las presentaciones del último libro de Ana Requena, ‘Intensas’, las señoras suelen contar que una se libera con los años.