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Elecciones
El mejor resultado histórico del BNG es insuficiente para quitar la mayoría al PP
El Partido Popular de Alfonso Rueda gobernará durante otros cuatro años más Galicia. Apenas caben dudas. Con casi el 100% de los votos escrutados, la estrategia del partido que Alberto Núñez Feijóo dejó en manos de un candidato desconocido en abril de 2022 hoy se ha revelado acertada. Ni siquiera la fuerza arrolladora e histórica del Bloque Nacionalista Galego (BNG) de Ana Pontón ha conseguido cambiar la posición dominante de la derecha gallega. Pontón ha cosechado un resultado histórico para el soberanismo gallego: en la nueva legislatura tendrán más fuerza que nunca con 25 diputados y diputadas, 6 más de los que cosecharon en el verano de 2020. Igualmente, no ha sido suficiente.
“Este resultado electoral nos indica que este país ya ha cambiado, que hay un antes y un después”, ha defendido la líder del Bloque, Ana Pontón. "Hemos tenido un resultado que rompe con todos los techos electorales del BNG y que nos sitúa como la esperanza de todas las personas que creen que Galicia necesita más (...) Este resultado nos parece insuficiente. Nuestro objetivo era abrir un tiempo nuevo en este país y darle a los gallegos y gallegas un gobierno liderado por el BNG”, ha añadido la candidata del BNG y nueva líder de la oposición, que si bien se ha mostrado decepcionada también ha querido poner en valor que su partido ha ganado con diferencia en la ciudad más poblada de Galicia, en Vigo, algo excepcional a nivel histórico.
Elecciones autonómicas
Elecciones 18F Sumar naufraga y Podemos desaparece en las elecciones gallegas
El centro izquierda del PSdeG-PSOE de José Ramón Gómez Besteiro se hunde en lo más profundo de su historia electoral y apenas consigue 9 diputados, 5 menos que en 2020 y atendiendo a la fuga del voto hacia el BNG, de facto, se descarta la hipótesis del castigo a la negociación de Pedro Sánchez con los partidos independentistas. O al menos, mayoritariamente. Besteiro ha sido franco en su intervención ante los medios de comunicación: “Nuestro cometido fue hacer entender la necesidad de un cambio pero no lo hemos conseguido. Por ahora. Porque la ciudadanía gallega nos ha situado en la oposición. Desde ahí realizaré el trabajo de tratar de traer a Galicia las mejores posibilidades”.
Sin embargo, una de las pocas sorpresas de este domingo es la entrada en el Parlamento de Galicia de Democracia Ourensana, el partido populista de derechas del alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome. El partido regionalista obtiene un diputado, pero que apenas tendrá capacidad de actuación ya que no podrá condicionar la acción de gobierno del Partido Popular. De hecho, el partido de Alfonso Rueda ha vuelto a ganar en todas las provincias gallegas. Ni siquiera las sumas de los partidos de la izquierda y el centro izquierda supera al Partido Popular.
Galicia castiga sin parangón a las izquierdas españolas
Tanto Sumar con Marta Lois como Podemos con Isabel Faraldo vuelven a pegarse de bruces con la realidad de la política gallega: ni lo consiguieron en 2020 bajo la marca Galicia en Común ni lo han conseguido ahora concurriendo por separado. Además, por mucho. Hasta la ultraderecha de Vox, extremadamente minoritaria en Galicia ha sacado más votos que los dos partidos juntos. Ninguna de las tres formaciones, de raíz estatal, se ha quedado ni cerca de conseguir un diputado. “Son unos malos resultados, hay que reconocerlo, sin paliativos”, ha reconocido la candidata de Sumar, que ha achacado a la falta de tiempo el principal motivo del descalabro electoral: “Sumar no fue capaz en este poco tiempo de lograr los objetivos” que se habían marcado, ha añadido. La candidata de Podemos al Parlamento gallego, Isabel Faraldo, también ha asumido la derrota: “En este momento entendemos que debemos fortalecer el proyecto de Podemos”.
La lectura no parece compleja. Ningún partido de matiz y enfoque ha conseguido mejorar sus resultados, todo lo contrario. Ni Sumar ni Podemos ni Vox tenían implantación territorial al llegar a la apertura de las urnas y, además, apenas contaban con militancia. Para mayor inri, aquel espacio llamado otrora izquierda transformadora y parte minoritaria de las mareas decidió concurrir por separado. La llegada de Democracia Ourensana al Pazo do Hórreo parece sellar más todavía esa tendencia.
El resultado de este domingo no es definitivo, pero sí decisivo
Aunque el resultado de la noche de este domingo no es definitivo, ya que los votos de los ciudadanos que sufragaron desde el extranjero se contarán a partir del 26 de febrero, ese resultado apenas influirá en la distribución de escaños. Eso sí, se alargará como máximo hasta el día 29 del mismo mes. Es decir, el resultado definitivo podría no saberse hasta dentro de 11 días. Sin embargo, atendiendo al histórico de datos, el reparto podría variar, como mucho, en un escaño. Algo insuficiente para variar el tablero.
La eliminación del voto rogado, a diferencia de citas electorales anteriores, podría aumentar la participación de los electores exteriores, que representan aproximadamente el 18% del censo electoral de Galicia, con casi medio millón de personas. Esto marca una diferencia significativa en comparación con los últimos comicios, donde el voto exterior había disminuido debido a las restricciones del voto rogado impuestas desde 2009. Pero todo parece apuntar a que no será finalmente decisivo.
Una campaña enfangada que no le ha pasado apenas factura al PP
Durante los últimos tres días de campaña, el Partido Popular y las instituciones gallegas se convirtieron en un solo ente, como acontece desde hace 300 semanas con la Televisión de Galicia. A menos de 72 horas de que abriesen las urnas, la Consellería do Mar de Alfonso Villares decidía ingresarle a alrededor de 7.000 mariscadores y mariscadoras un subsidio de 550 euros para paliar una mala campaña, supuestamente anterior a la crisis de los pellets, pero cuya convocatoria se abrió en el punto más álgido del desastre. Pero a la chequera todavía le quedaban hojas. A solo dos días de las elecciones, este viernes, la Xunta, a través de la Consellería de Sanidade de Julio García Comesaña envió decenas de miles de SMS a todo el personal sanitario de Galicia que trabaja en el Servizo Galego de Saúde (Sergas) anunciando subidas salariales a médicos y médicas, enfermeros y enfermeras, técnicos y técnicas. Algunas de ellas, acordadas durante marzo de 2023. Pero la revelación de todas estas estratagemas apenas le ha pasado factura al partido de Rueda que mantendrá, pese a todo, una mayoría absoluta mucho más holgada de lo previsto a izquierda y derecha.
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Enésimo ejemplo de lo que es buena parte de la sociedad española. Una caterva de subnormales que votan a sus tiranos. Enésimo también recordatorio, a aquellas gentes de izquierda que, amparados en un purismo ideológico exagerado, no votan porque le ponen pegas a todo.....